Los colegiados del Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Asturias (CODES) han celebrado su asamblea general anual en la que, por unanimidad, dieron su conformidad a la cuentas del año 2017. Asimismo, aprobaron los presupuestos de la corporación para el año 2018.

Los colegiados aprobaron crear una fundación sin ánimo de lucro como instrumento que canalice y enriquezca la promoción de la salud bucodental y el bienestar de los asturianos, "objetivo prioritario del Colegio", según un comunicado público de la institución. Dicha entidad "permitirá llevar a cabo diferentes iniciativas para la puesta en marcha de nuevos medios de formación para los dentistas asturianos y el apoyo a los sectores más desfavorecidos en salud bucodental", indica la nota.

En el ámbito de la responsabilidad social corporativa, la institución aprobó una partida para acción social, que nuevamente irá destinada a renovar las subvenciones económicas solidarias para la clínica bucodental Codes-Cáritas, que atiende en Oviedo a personas en riesgo de exclusión social; y para la clínica dental en el Hospital de Monkole (El Congo). Asimismo, este año se ha aprobado dotar una partida económica para colaborar con la Real Academia de Medicina de Asturias.

Durante la asamblea se informó a los colegiados de la actividad desarrollada por el Colegio durante todo el año 2017. Además, el Colegio aprobó, un año más, no cobrar la cuota colegial a los colegiados en desempleo, así como aplicar una compensación económica del 11 por ciento en el importe de la cuota del segundo, tercer y cuarto trimestre del año.Salud dental y cáncer

El Colegio de Dentistas está presidido por Javier González Tuñón. Recientemente, con motivo de la celebración del Día Mundial contra el Cáncer, la institución subrayó la incidencia de la enfermedad en cuestiones bucodentales y la importancia de la divulgación de buenos hábitos, así como medidas de prevención del cáncer.

Según González Tuñón, "es conocido, y cada vez con un mayor apoyo bibliográfico, cómo una alteración cancerosa y los diferentes tratamientos que se prescriben, repercuten de manera muy negativa en la boca: sensación de boca seca por disminución de saliva, disminución de la capacidad para abrir la boca, movilidad de piezas, sangrado de encías...".

En consecuencia, desde el órgano colegial se insiste en la necesidad de realizar una exhaustiva revisión bucodental desde que se diagnostica la enfermedad y antes de iniciar cualquier tratamiento que luego puede ser condicionante negativo para ciertos actos, como la exodoncia de un diente. "Es fundamental acudir a un dentista de confianza que aconseje de qué manera se puede reforzar la salud de la boca, como el uso de pastas dentífricas con mayor aporte de flúor, enjuagues ricos en antisépticos, aumentar la periodicidad de las revisiones...", enfatiza Javier González Tuñón.