La "cumbre" autonómica reforma la convocatoria, se expande hacia el Este y enriquece el orden del día. El encuentro de presidentes regionales con intereses y desafíos comunes, que tuvo el pasado diciembre en Oviedo una primera edición con los de Asturias, Galicia y Castilla y León, repite experiencia hoy en León sumando a Aragón y añadiendo el futuro de la minería y de las centrales térmicas de carbón a una lista de retos confluentes donde ya figuraban la búsqueda de estrategias conjuntas en la inminente reforma del sistema de financiación autonómica o de soluciones propias para la crisis demográfica.

Los cuatro gobiernos autonómicos vuelven a tratar de tomar posiciones que salven diferencias políticas. Hoy, de momento, igualan las fuerzas ideológicas sentando a la mesa a dos presidentes del PP -el anfitrión castellano-leonés Juan Vicente Herrera y el gallego Alberto Núñez Feijóo- ahora con dos socialistas, añadiendo al aragonés Francisco Javier Lambán al asturiano Javier Fernández. En el resumen que hizo ayer el presidente del Principado, "es bueno que los gobiernos autonómicos hablemos para defender un país industrialmente fuerte, solidario en su financiación y capaz de hacer frente al declive demográfico". La certeza de que "compartimos criterios en todas estas cuestiones clave para nuestras comunidades" conduce a Fernández a la más reciente incorporación al orden del día de la cumbre, su vertiente minera y energética.

El jefe del Ejecutivo autonómico buscará más fuerza para trasladar a la Administración central y a las instituciones europeas su convicción de que, aun compartiendo la necesidad de reducir las emisiones de carbono a la atmósfera, "no estamos dispuestos a asumir una transición energética precipitada que conlleve el cierre innecesario de centrales térmicas, provoque la pérdida de empleos, disminuya la actividad del puerto de El Musel y genere un aumento del precio de la electricidad, con el consiguiente perjuicio para las industrias electrointensivas instaladas en Asturias". El Principado busca aquí la complicidad de los que se encuentran en su misma situación, dado que Castilla y León tiene la térmica palentina de Velilla apercibida de cierre igual que la asturiana de Lada, en Aragón está amenazada para 2020 la central de Endesa en Andorra (Teruel) y también están en entredicho las plantas de Anllares (León) o Meirama (La Coruña).

En este año clave también para la minería de carbón, en el que Europa tiene puesta la fecha de caducidad para las explotaciones deficitarias, "la pelea por su supervivencia" hace confluir asimismo los intereses del sector en Asturias, León y Aragón. Por eso el Principado buscará hoy apoyos para su pretensión de conseguir que la UE "flexibilice" las condiciones del cierre.

Los presidentes de cuatro comunidades de estructura demográfica e intereses financieros parecidos hablarán de todo eso y de nuevo de estos otros retos comunes. Los cuatro reclamarán al Gobierno central que agilice las negociaciones en el Consejo de Política Fiscal y Financiera para alcanzar un acuerdo de financiación autonómica donde prime la igualdad en la prestación de los servicios públicos sobre la capacidad fiscal de los territorios y apremiarán al Estado a presentar la estrategia nacional contra el envejecimiento y la despoblación.