Francisco Álvarez-Cascos criticó ayer la iniciativa del consejero asturiano de Infraestructuras, Fernando Lastra, de pedir el Gobierno central que elimine el peaje de la autopista del Huerna. "Es una pillería política de precampaña electoral asturiana", valoró el secretario general de Foro, que era vicepresidente del Gobierno de José María Aznar que, en el año 2000, decidió prorrogar la concesión de la autopista astur- leonesa hasta 2050 (el contrato inicial vencía en 2021) y, al mismo tiempo, que no fuera de pago la autovía entre León y Benavente, tal y como estaba previsto en las programaciones de la época de José Borrell como ministro de Infraestructuras. "Cuando se decidió prorrogar la concesión de la autopista del Huerna a cambio de la rebaja de peajes, para hacer esa rebaja había que aumentar los años de concesión", añadió Cascos, quien responsabilizó a Lastra de querer que "la promesa de Zapatero, que fue el único que se comprometió a eliminar el peaje del Huerna, la cumpla Rajoy". Resaltó que rescatar una autovía "cuesta dinero".