La niña herida grave en el incendio que tuvo lugar a las dos de la madrugada de ayer en un edificio de El Berrón evoluciona favorablemente de sus lesiones según los más allegados a la familia. A pesar de todo su estado sigue siendo grave. Carla Fonseca, de cinco años, fue atendida en un primer momento en el HUCA, pero dada la gravedad de sus quemaduras los médicos optaron por trasladarla al madrileño hospital de La Paz, especializado en la atención de personas quemadas.

El padre de la pequeña, de 41 años, falleció en el siniestro cuando trataba de salir del edificio. La otra herida, una mujer de 84 años, se encuentra en estado grave ingresada en el Hospital Universitario Central de Asturias.

Una fatídica madrugada

Rubén Fonseca Patallo, de 41 años, encontró la muerte abrazado a su hija Carla, de 5 años, cuando la familia huía de madrugada del fuego que se declaró en el cuadro de contadores de su portal, el número 3 de la calle Río Magostales de El Berrón (Siero). Su esposa, Verónica Iglesias Cañizares, de 39 años y la hija mayor de la pareja, Nerea, de 15, bajaban tras ellos desde el tercer piso en el que residen. A la altura de la primera planta no pudieron soportar más el humo. "¡Rubén, vuelve! ¿Dónde vas?", fue el grito desgarrador de la mujer. Pero Rubén Fonseca ya no respondió. Cayó desplomado, con la pequeña Carla en brazos, frente al cuadro de contadores convertido en un infierno calcinado. La vecina del cuarto, Aurelia Suárez, de 84 años, que acompañaba al padre y la hija tratando de salvar su vida, resultó herida grave.