Según los datos publicados por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en el último Informe de Violencia de Género, 2.505 mujeres fueron víctimas de esta lacra social en Asturias el año pasado. A pesar de que es la cuarta tasa más baja del país, se recibieron 2.711 denuncias por violencia machista, un número todavía alarmante según los expertos.

Los redactores del informe destacan el hecho de que el 34,43% de las víctimas continuaban teniendo una relación con su maltratador, mientras que el 29,08% ya había cortado el vínculo con su pareja. El 20,56% de las denunciantes presentó la denuncia por malos tratos contra su por entonces cónyuge y un 15,93% ya se había divorciado de su agresor. Es decir más del 54 por ciento (casi seis de cada diez) mantenían algún tipo de relación con el agresor: o estaban casadas con él o tenían relación afectiva.

En total, 822 asturianas solicitaron el año pasado alguna medida de protección a las autoridades para salvaguardarse del denunciado. Dentro de esta cifra, desgranamos que 813 son mayores de edad frente a las 9 menores.

De las 2711 denuncias, sólo 444 de los agresores fueron enjuiciados, siendo condenados el 92,2% de los acusados. El porcentaje restante, es decir 33 hombres, fue absuelto.