La Autovía del Suroccidente sigue avanzando. El Ministerio de Fomento aprobó ayer el proyecto para duplicar el tramo Salas-El Regueirón, lo que permitirá ampliar en 5 kilómetros la autovía A-63. El departamento que encabeza Íñigo de la Serna licitará este año el tramo por un máximo de 9,17 millones de euros.

La A-63, una "infraestructura prioritaria" para mejorar las comunicaciones del interior asturiano, según Fomento, tiene en la actualidad un tramo en obras, en Cornellana-Salas, después de que el 26 de diciembre pasado se reanudaran unas obras suspendidas desde la etapa socialista en el Gobierno central. Justo ese mismo 26 de diciembre De la Serna inauguraba el tramo Doriga-Cornellana, también de la A-63.

La solución adoptada para el tramo Salas-El Regueirón supondrá "una mejora inmediata y notable de la calidad de vida de los vecinos de los municipios de Salas, Grado y Tineo, así como, de forma más general, para toda la zona interior del occidente de Asturias", señaló Fomento.

El proyecto prevé duplicar la calzada y acondicionar la ahora existente. El proyecto incluye un único enlace, el de Salas, cuyos ramales ya estaban ejecutados y varias estructuras: los viaductos de Nonaya (190 metros) y Regueirón (560 metros), tres pasos inferiores, un paso de fauna y dos pasos superiores.

Fomento ya ha anunciado que su intención es llevar la A-63 hasta Canero (localidad situada a unos 19 kilómetros de El Regueirón), donde conectará con la Autovía del Cantábrico. El Gobierno del Principado quiere que el vial continúe también en el futuro hacia Ponferrada.

La actuación en el tramo Salas -El Regueirón tiene una longitud de 4,9 kilómetros y contempla la adaptación de la segunda calzada y las obras de acondicionamiento de la primera.

La sección tipo de la segunda calzada tendrá dos carriles de 3,5 metros De anchura y arcenes exterior e interior de 2,5 y 1,0 metros, respectivamente, así como una berma exterior de 1,0 metros y una mediana de 4,0 metros.

El proyecto incluye un único enlace, el de Salas, cuyos ramales ya estaban ejecutados y las siguientes estructuras: los viaductos de Nonaya (190 metros) y Regueirón (560 metros), tres pasos inferiores, un paso de fauna y dos pasos superiores.

La anterior inauguración en la A-63 fue el del tramo Doriga-Cornellana, de 2,3 kilómetros de longitud, el pasado 26 de diciembre, y contó con la presencia del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna; el delegado del Gobierno, Gabino de Lorenzo, cinco senadores, diputados en el Congreso, parlamentarios autonómicos, directores generales, alcaldes, concejales, responsables de la obra... Fue el primer tramo de autovía inaugurado en Asturias en tres años: el último fue el Pendueles-Unquera de la autovía del Cantábrico, el 30 de diciembre de 2014. Y supuso el desbloqueo -definitivo, según Fomento- de la autovía del Suroccidente.

La obra, que había comenzado en 2007, durante la etapa de la socialista Magdalena Álvarez como ministra de Fomento, quedó parada en 2010 (aún con la gaditana en el cargo), oficialmente a causa de la crisis, lo mismo que el tramo vecino, el Cornellana-Salas.