Llevar la alta velocidad hasta Asturias costará finalmente 3.760 millones de euros, según los cálculos del Ministerio de Fomento. De esa cantidad, correspondiente a los tramos León-La Robla y Variante de Pajares, ya se han contratado hasta hoy 3.568,24 millones de euros, lo que supone el 94,9 por ciento del coste total. Además, del 5,1 por ciento pendiente (casi 192 millones) se encuentran en la actualidad en proceso de licitación y firma contratos de obras por valor de otros 124,08 millones, lo que supone el 3,3 por ciento del total. El 1,8 restante (67,68 millones) se destinará, en los próximos meses, a las instalaciones y la catenaria del tramo León-La Robla, a los proyectos de permeabilidad en San Andrés del Rabanedo (León) y a otros trabajos pendientes, según revelaron fuentes de Fomento.
Toda esta inversión, que supone más del triple de la calculada inicialmente (1.085 millones fue la estimación del Gobierno de José María Aznar en 2003), servirá para que el AVE llegue hasta Pola de Lena en el verano de 2020, según adelantó en diciembre a LA NUEVA ESPAÑA el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna. Aunque en ese momento tendrá que empezar la circulación en pruebas por uno de los dos túneles de la variante de Pajares, por lo que la circulación comercial aún se demorará unos meses.
El tramo Pola de Lena-Gijón, anunciado a bombo y platillo en su día y cuya tramitación se inició hace más de un decenio, aguarda metido en un cajón del Ministerio, al considerar las autoridades que su elevado coste (unos 1.600 millones, según estimaciones del Principado) no compensa el relativamente escaso tiempo de mejora que supondría (menos de 20 minutos, según Fomento).
El compromiso de De la Serna es acometer una mejora integral de la vía actualmente existente, de ancho ibérico (1.668 milímetros). Una mejora que se enmarca dentro del Plan de Cercanías de Asturias. La inversión para el tramo Pola de Lena-Gijón asciende a 339 millones de euros e incluirá la colocación de traviesa polivalente, con vistas a un futuro cambio a ancho estándar.
Y es que, según estudios realizados por Adif, la diferencia en tiempos entre la opción barajada en el estudio antiguo, que pasaba por convertir el tramo Pola de Lena-Gijón en línea AVE con ancho europeo estándar (1.445 milímetros), y la anunciada ahora por el Ministro "no es tan grande". Un estudio del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Asturias señalaba en 2009 que la diferencia entre doblar la velocidad de 120 a 240 kilómetros entre Pola de Lena y Oviedo sería de 7,5 minutos, y entre Oviedo y Gijón, de diez minutos. Es decir, se ahorrarían menos de 18 minutos. En la actualidad los 62 kilómetros que separan Pola de Lena de Gijón se recorren a velocidades que oscilan entre los 85 y los 130 kilómetros por hora. La complicada orografía del tramo limita la posibilidad de alcanzar mayores velocidades y, a la vez, complica enormemente la construcción de una línea AVE, tanto desde el punto de vista técnico como del económico, pues obligaría a que buena parte del recorrido discurriera bajo tierra, lo que dispararía los costes.
Adif Alta Velocidad daba el pasado día 2 un nuevo e importante impulso al desarrollo de esta conexión, al aprobar la licitación de varios contratos por un importe global de 83,7 millones de euros. El Consejo de Ministros autorizaba ese día la licitación del montaje de vía en el tramo La Robla-Campomanes, por importe de 36,2 millones de euros. Asimismo, el consejo de administración de Adif aprobaba la licitación de suministro de traviesas y carril para el tramo La Robla-Campomanes-Pola de Lena, y desvíos ferroviarios para el León-Variante de Pajares, por importe conjunto de 47,6 millones.
De este modo, el Ministerio de Fomento destacaba su "compromiso" de desarrollar todos los trabajos necesarios para la puesta en servicio "cuanto antes" de la Variante de Pajares. "Se trata de un paso definitivo y del último gran proyecto que restaba por aprobar para hacer realidad la llegada de la alta velocidad a Asturias", señaló ese día el ministro de Fomento, a la vez que destacaba que se siguen cumpliendo "todos los compromisos adquiridos" sobre este proyecto fundamental para Asturias.
Además, De la Serna recordaba que los tiempos de viaje se reducirán en breve en unos diez minutos con la implantación del sistema se gestión de tráfico ERTMS en todo el trayecto Madrid-León, a la vez que la eliminación de la situación actual de fondo de saco de la estación de León, a finales de este año, implicará una reducción adicional de otros veinte minutos entre Asturias y la Meseta central.
