Una buena noticia: consumen menos. Otra mala: empiezan antes. El consumo de drogas -alcohol, tabaco y cannabis- entre niños y adolescentes se ha reducido en Asturias en los dos últimos años, pero también ha descendido la edad en la que comienzan a usarlas, que ahora se sitúa en torno a los 14 años. Incluso antes en el caso del alcohol, la sustancia con la que primero se experimenta. Lo bueno del caso es que, por vez primera, baja significativamente el número de jóvenes que reconocen haberse emborrachado en los últimos 30 días, hasta situarse en los valores más bajos de la serie histórica. Este parámetro se fijaba en la encuesta de hace dos años en el 27 por ciento entre estudiantes de 14 a 18 años, y ahora desciende hasta el 20 por ciento (con cifras muy similares para chicas y chicos). Esta reducción coincide con la entrada en vigor de la Ley de Drogas de Asturias, que ha elevado la edad legal para el consumo de alcohol de 16 a 18 años, si bien la tendencia ya se apuntaba anteriormente. La edad media de inicio en la ingesta esta sustancia se sitúa en los 13,9 años.

Éstas son algunas de las principales conclusiones de la Encuesta sobre el uso de drogas en Enseñanzas Secundarias en España (Estudes), cuyos datos fueron presentados ayer en Oviedo por el director general de Salud Pública del Principado, Antonio Molejón; el director del Plan de Drogas para Asturias, José Ramón Hevia, y el técnico Antón González.

Antonio Molejón valoró positivamente la reducción del consumo de alcohol, tabaco y cannabis. "Se trata de un logro indudable que tendrá efectos positivos para la salud individual de las personas", subrayó. Asimismo, destacó el diferente patrón de consumo en función del sexo, ya que las mujeres tienden a consumir más sustancias legales -alcohol, tabaco...- y son más reacias a utilizar las del mercado ilegal.

Según este estudio, en los últimos cuatro años ha disminuido el porcentaje de menores que consumen alcohol ocasionalmente y también el de aquéllos que lo hacen a diario. El alcohol es la sustancia más extendida entre los jóvenes asturianos y también en el resto del país. Pese al descenso, en Asturias aún lo consumen tres de cada cuatro jóvenes en edad escolar, lo que sitúa al Principado por encima de la media del país, sobre todo en cuanto a la ingesta que se produce en los últimos 30 días. Las chicas beben con más frecuencia que los chicos, salvo entre los que lo hacen a diario. Además, el porcentaje de consumidores se incrementa con la edad.

Por otra parte, el consumo diario de tabaco mantiene su caída y se consolida ya por debajo del 10 por ciento, con un 8,1 por ciento en el caso de las chicas y un 7,2 por ciento en el de los chicos. También disminuye el porcentaje de consumidores habituales de hipnosedantes, aunque aumenta el de las personas que los utilizan de forma ocasional.

En relación con el cannabis, todos los indicadores de consumo han descendido significativamente desde 2004, una bajada agudizada en los dos últimos años, con una única excepción: el consumo diario, que permanece estable.

Incluido en el Plan Nacional sobre Drogas, la encuesta Estudes se lleva a cabo cada dos años para conocer los patrones de consumo y orientar el desarrollo y la evaluación de las intervenciones. El Principado decidió ampliar el tamaño de la muestra para mejorar la fiabilidad estadística. Para ello entrevistó en noviembre de 2016 y marzo de 2017 a un total de 1.896 jóvenes (978 chicos y 918 chicas), estudiantes de Secundaria, Bachillerato o ciclos formativos de grado medio de 48 centros públicos y privados.