No convenció a nadie que no fuera del PSOE. La oposición en pleno dejó caer una catarata de amonestaciones sobre el máximo responsable de una institución que desde esa perspectiva se ve seriamente dañada en uno de sus mayores activos, la credibilidad.

La intervención de ayer, le dijo el diputado del PP José Agustín Cuervas-Mons, "ha empeorado las cosas", y Avelino Viejo se le reveló "como un enredador nato. Ha hecho un intento casi mágico de quitar hierro a la sentencia", aseguró antes de adelantar que su grupo activará el mecanismo parlamentario de destitución, algo en lo que coincide Podemos y que tiene a favor al menos a IU y Foro, votos suficientes para poner fin al último mandato de Viejo con algo menos de un año de antelación sobre su fecha programada.

Enrique López (Podemos) hizo énfasis en la condición de reincidente de la Sindicatura, sobre la que pesan "cinco sentencias condenatorias en materia de personal", y anunció que también ellos van a "promover la reprobación política y el cese" de Viejo. El adelanto previsto del final de esta historia lo expuso el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, a medias con Quevedo. "Mi grupo teme que, como en el clásico, el alguacil termine alguacilado". Teme en realidad "otra huida hacia delante" del rector de una institución que "ha tardado diez años en aprobar su relación de puestos de trabajo", de alguien que ha puesto a la Sindicatura "en almoneda" después de viajar en su política de personal "de la obstinación a la obcecación".

La portavoz de Foro, Cristina Coto, reactivó su petición de dimisión después de reprobar con dureza la actitud de un síndico que "debe de creer que está por encima del bien y del mal y, tal vez porque lleva demasiado tiempo, que la Sindicatura es su cortijo". Armando Fernández Bartolomé (Ciudadanos) otorga un "muy deficiente" a la política de personal, aunque después de pedir cambios se modera y aboga por "no prejuzgar" y "valorar su declaración de intenciones".

El grupo que propuso el nombramiento de Viejo, el PSOE, es también su última línea de defensa en la Junta. Instando a cumplir la sentencia, Margarita Vega apunta que "no parece que concurran circunstancias para decir que se ha desviado de su labor y llevar a la Sindicatura a un ataque con las expresiones gruesas que aquí se han escuchado"