El alcalde de Colunga, Rogelio Pando, se acogió ayer a su derecho a no declarar ante la jueza de Lugo Pilar de Lara, que instruye el "caso Aquagest". Con esta declaración, señalada hace la friolera de ocho meses, la jueza quería aclarar si "el alcalde se habría beneficiado de un viaje en 2008 a Zaragoza y Barcelona", abonado por Aquagest.

También declararon, como testigos, el gerente de una filial de Aqueagest de 1991 a 2006, y luego de Hipsitec, empresa que aconsejó renovar el servicio de agua de Colunga con Aquagest sin una nueva licitación. Igualmente prestó declaración el jefe de distribución que firmó la recepción de la obra del depósito de agua de Gobiendes (Colunga).

El "caso Aquagest" está pendiente de una cuestión de competencia planteada ante el Supremo. De Lara se inhibió ante la Audiencia Nacional, con el beneplácito de la Audiencia de Lugo. Carmen Lamela, de la Audiencia Nacional, rechazó hacerse cargo del caso.