El rector de la Universidad, Santiago García Granda, sacó ayer pecho de su gestión a punto de alcanzar el ecuador del mandato y arremetió contra el Principado por la "desgracia" que supone para la institución académica la "lentitud" con la que la Administración regional actúa en las convocatorias públicas de ayudas a investigadores y en la atención a las necesidades de la institución. Fue ante en el Claustro, en una sesión atípica, pues normalmente se celebra una al año el mes de diciembre, con varios asuntos que propiciaron el debate, dónde García Granda expresó públicamente que "desafortunadamente" aún no se han convocado las ayudas a grupos de investigación y la Universidad trata de paliarlo con su propio programa.

Destacó el Rector en la presentación de su informe que, en los dos últimos años promocionaron 61 catedráticos, 68 titulares, 90 ayudantes doctor y este año se convocarán el resto de plazas "para que todos los acreditados tengan su oportunidad". También mencionó que se han reducido a menos de 400 el número de profesores asociados en una plantilla de 2.000. Asimismo, anunció que la próxima semana arranca la comisión de nuevos títulos.

Preguntado por la paralización de la convocatoria de unas plazas de contratado doctor interino, tras ser informados desde el Ministerio del inicio de un contencioso contra la Universidad, García Granda explicó que ese asunto se resolverá con el lanzamiento de una nueva oferta. Tras ello, fue exhortado por el profesor Ismael Sarmiento a explicar "las irregularidades" en el proceso de selección de un plaza de ayudante doctor de Historia Moderna. "El Rector no actúa, solo supervisa", le respondió Granda. "Espero que no llegue a la Justicia como otros casos", advirtió Sarmiento.

El máximo responsable de la institución fue preguntado también sobre el cumplimiento de sus compromisos con los estudiantes. Sobre la rebaja de tasas les dijo: "Contáis con mi apoyo, el problema es convencer al Consejero y a la directora de Universidades". A los doctorandos que le pidieron explicaciones sobre los retrasos de las ayudas "Severo Ochoa" les respondió con una nueva ofensiva contra el Principado: "Es una desgracia que dependamos de la lentitud en poner en marcha las convocatorias". En la misma línea se expresó ante la petición de unificar la EBAU. "Actuaremos dentro del margen que tenemos", prometió.

Los representantes de las Asambleas de Estudiantes interrogaron al Rector durante la sesión del Claustro de ayer acerca del grado de cumplimiento de sus compromisos con este colectivo. Al respecto del plan anunciado para avanzar en el proceso de normalización lingüística en la institución académica, Santiago García Granda fue muy claro: "La cooficialidad es la única forma de que el asturiano pueda sobrevivir en el futuro". Según explicó, desde el Rectorado se están tomando todas las medidas que permite la Ley de Promoción y Uso de Asturiano. "Reavivaremos el reglamento que tuvo una decisión judicial", señaló Granda.

La institución docente está colaborando en la finalización del "Diccionariu Etimolóxicu" y "potenciando todos lo que la Ley de Promoción y Uso del Asturiano nos permite; y así seguiremos", concluyó.

Comité de ética

Junto a todas estas decisiones, el Claustro proclamó ayer a los integrantes del nuevo comité de ética de la Universidad que fue aprobado en una de las últimas reuniones del Consejo de Gobierno. Por parte del Personal Docente e Investigador (PDI) han sido designadas las profesoras Ana Fernández García (Artes y Humanidades), Adonina Tardón García (Ciencias de la Salud), María Jesús Cañal Villanueva (Ciencias), el profesor Hilario López García (Ingeniería) y la profesora María José García Salgado (Ciencias Sociales y Jurídicas). Por parte del estudiantado fueron elegidos Alba Villa Fernández y por el Personal de Administración y Servicios (PAS), Ramón Jesús Argüelles Fraga.

El mencionado comité es el órgano responsable de velar por el comportamiento ético de la institución en todas sus funciones como servicio público de educación superior y de investigación científica y técnica.

Entre los objetivos este nuevo órgano consultivo estarán el de promover la cultura ética en la comunidad universitaria, redactar un código ético de la Universidad de Oviedo mediante un sistema participativo que incorpore al conjunto de la comunidad académica, y proponer e informar para su aprobación de cuantos reglamentos y protocolos sean necesarios para salvaguardar la actuación de la propia Universidad y los elementos que la inspiran.