Asturias es una de las comunidades autónomas más envejecidas del país, y las previsiones de futuro del Instituto Nacional de Estadística (INE) apuntan a que en 2031, uno de cada tres asturianos tendrá más de 65 años. Con esta perspectiva, el Principado se ha puesto manos a la obra y ha elaborado la Estrategia de Envejecimiento Activo, bautizada como "Estrena", una novedosa iniciativa en el ámbito europeo en la que se plantea desde una vida saludable e integrada en la sociedad hasta las posibilidades de desarrollo económico que el envejecimiento ofrece al territorio. Es lo que los expertos denominan "silver economy", hacia la que avanza Europa para generar nuevos empleos y crecimiento económico basados en la atención a los mayores de 65 años, con buena salud, expectativa de vida, formación y con una situación económica estable.

Urbanizaciones y viviendas adaptadas con servicios comunes, atención sociosanitaria integrada, y desarrollo tecnológico enfocado al servicio a los mayores son algunos de los nichos de negocio y de mercado con gran potencial.

La Consejera de Derechos y Servicios Sociales, Pilar Varela, presentó ayer oficialmente la estrategia "Estrena 2018-2021" tras ser apobada por el Consejo de Gobierno del Principado. "No tiene dotación económica propia porque se trata de recopilar todo lo que se está haciendo de manera dispersa, ordenarlo, darle coherencia y trabajar de manera coordinada con otras consejerías, organismos, organizaciones y asociaciones", puntualizó Varela.

El documento fue elaborado en colaboración con la Universidad, el Consejo de Mayores y ayuntamientos, además de otros colectivos y organizaciones, y con encuestas personales para conocer la realidad social, económica y de salud de los mayores de 65 años en Asturias. "Y sobre todo saber qué quieren los mayores, qué necesitan, ellos reclaman que se cuente con ellos".

El plan, que sigue las recomendaciones de organismos internacionales, recoge 103 medidas de actuación en cuatro ejes estratégicos. La implantación y evolución de todas ellas va acompañada de un sistema de evaluación para corregir y avanzar.

Las políticas de envejecimiento activo se aplican a partir de los 55 años, porque incluye medidas para preparar a la sociedad en la transición del mundo laboral a la jubilación. Pero también propone implicar a los niños y a los jóvenes en un proceso de integración social.

Los cuatro ejes de trabajo son de gobernanza y participación, dando voz a los mayores de 55 años y ofrecerles espacios de participación. Engloba además medidas para envejecer bien, o dicho de otro modo, para llevar una vida sana y saludable que ayude prevenir la dependencia y reforzar la vida autónoma. En este apartado se incluye, por ejemplo, la formación continua, que permite no sólo ampliar conocimientos, sino también ampliar las relaciones sociales. Se busca también una sociedad accesible, inclusiva y amigable, favoreciendo el buen trato y las relaciones intergeneracionales.

Y hay otro aspecto que permite ver el envejecimiento activo como una fuente potencial de desarrollo económico. Es en este apartado donde se incluye el impulso de la investigación, la innovación y el desarrollo de productos y servicios orientados a la atención y necesidades de los mayores.

Este apartado incluye el impulso de empresas tecnológicas que desarrollen nuevos productos por ejemplo de teleasistencia, con tecnología que facilite la atención social y médica a los mayores en su propia vivienda, permitiendo así que puedan ser independientes el mayor tiempo posible.

Pero también abarca otros nichos de negocio, como el urbanismo y la construcción. Se piensa, por ejemplo, en el desarrollo de urbanizaciones en las que se viva a modo de cooperativa: viviendas individuales con servicios y asistencia comunes, como el de comedor y lavandería. Este modelo, que ya se está desarrollando en otros países del norte de Europa, facilita que las personas mantengan su independencia aunque con atención especializada permanente. Se aleja así la visión de los actuales geriátricos que aún encuentran cierto rechazo entre los más mayores.

La estrategia "Estrena" también plantea incrementar las ayudas que faciliten la adaptación de viviendas para dotarlas de mayor accesibilidad y seguridad, y de calles y espacios urbanos más cómodos y amigables para los mayores.

La presentación pública del plan "Estrena 2018-2021" se celebrará el próximo día 20 en el Auditorio Príncipe Felipe de Oviedo. Al acto asistirán expertos nacionales e internacionales en envejecimiento activo.