La tijera de Cristóbal Montoro ha vuelto a recortar las expectativas financieras del Principado. Recalculando, el Ministerio de Hacienda ha llegado a la conclusión de que las entregas a cuenta del mecanismo de financiación autonómica que corresponden al Principado están casi diecisiete millones por debajo de su último cómputo. La resta implica una rebaja en los ingresos del sistema que Asturias, al decir de la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, debería recibir este año pero Madrid mantiene "retenidos" e "incomprensiblemente vinculados a la aprobación del proyecto de presupuestos del Estado": esa partida ya no alcanza los 116 millones de euros de la reclamación repetida durante los últimos meses. Ahora son 99.

La comunicación que la Consejería de Hacienda recibió del Ministerio el pasado día 5 de abril amplía el volumen del "mordisco" de Montoro a las cuentas del Principado mediante un nuevo cálculo de la participación que corresponde a Asturias en los recursos del Fondo de Garantía, uno de los tres capítulos en los que se articula el reparto de fondos entre las autonomías. Los más de 249 millones que la cuenta anterior atribuía a la región por este concepto pasan hora a ser 233, obligando al Ejecutivo autonómico a un cambio de planes que además de anunciar un ajuste aun mayor de la financiación modera el objeto de su combate por la liberación de las entregas a cuenta del sistema: donde se pedían 116 millones -la diferencia entre lo que Hacienda prometió en julio y la previsión de ingresos a la baja que hizo a comienzos de año aduciendo que no podía llegar a lo prometido sin unos presupuestos aprobados- deben reclamar 99. Así será si no da resultado la petición de explicaciones y la que el Principado ha remitido ya a su vez a Madrid.

Dolores Carcedo deslizó el dato y la protesta sobre el adelanto de la nueva merma de recursos durante su comparecencia para explicar a la Junta el proyecto de ley de crédito extraordinario que patrocina el Gobierno, su estrategia para tratar de atemperar al impacto de la prórroga presupuestaria mediante el gasto de 111,3 millones adicionales a los créditos del presupuesto prorrogado. De esa cantidad, por cierto, una parte de lo destinado a inversiones -27,6 millones- nace explícitamente condicionada al desbloqueo de la financiación autonómica que en la versión del Principado permanece "retenida" en Madrid. Esos 116 millones, reducidos ahora a 99, fueron la mala noticia del pasado enero: en esa fecha, el Ministerio de Hacienda comunicó al Principado que sin un presupuesto aprobado no podría cumplir con la asignación de financiación prometida en julio y que, en consecuencia, los 2.563 millones anunciados en verano se quedarían en 2.447.

El Principado protestó entonces por tener que pagar las consecuencias de la prórroga presupuestaria del Estado -que sumada a la del Principado es la "doble prórroga" de la que habla Carcedo siempre que tiene ocasión- y lamenta ahora que de la cuenta inicial se resten otros 17 millones que directamente, según Hacienda, ya no le corresponden.