El alcalde de Langreo, Jesús Sánchez (IU), contagiado del cabreo de su homónimo mierense, lanzó ayer una advertencia a Principado y Universidad de Oviedo: "Si el grado de Deportes no acaba en el campus de Barredo, desde las Cuencas no nos vamos a poner a llorar, vamos a pelear juntos". Sánchez, que aseguró entender la desazón que invade al regidor mierense, ha hecho suya la indignación de su amigo Aníbal Vázquez. Hasta el punto de que Langreo estaría dispuesto a descabalgarse en marcha del proyecto del área metropolitana si "no hay reparto territorial". En Mieres han ido un paso más lejos y Vázquez ya ha dicho que, en estas circunstancias, que no cuenten con el municipio. "Tenemos la sensación de que todas las inversiones se van para Oviedo, Gijón o Avilés. El Principado debe intervenir y pronunciarse. Debe dar armonía a la región", apuntó Sánchez.

El SOMA también se decantó ayer por Mieres en la pugna abierta con Gijón. El sindicato minero considera "vital" para el campus de Barredo la implantación del grado de Deporte. "Reúne las mejores condiciones para albergarlo, por lo que no vamos a renunciar a su defensa". Los portavoces del sindicato remarcaron que no van a permitir "que se descapitalice académica y formativamente el campus mierense como paso previo al inicio de su desmantelamiento y traslado de equipamientos a otros centros universitarios". El SOMA utilizará "todas las medidas y recursos" que tenga a su alcance para evitarlo, "incluida la llamada a la movilización social".

A la espera de lo que haga el SOMA, el Ayuntamiento de Mieres, en colaboración con la sociedad civil, ya prepara una campaña reivindicativa, que se dará a conocer hoy. Ayer, todos los partidos con representación municipal, incluido el PSOE, acordaron hacer un frente común. Pedirán a sus respectivos grupos parlamentario que promuevan en la Junta una iniciativa de respaldo a la candidatura mierense.

Mientras en Mieres el ruido es cada vez mayor, el gobierno avilesino sigue fiel a su estrategia de mantenerse a la expectativa en su aspiración de lograr también el grado de Deporte. Quien sí ha salido a la palestra es el portavoz de la Plataforma por la Facultad de Ciencias de la Educación Física y el Deporte, Julián Fernández, planteando que la deseada Facultad sea compartida entre Avilés y Oviedo "de manera que se compartan infraestructuras ya existentes y de ese modo se logre contener el coste de implantación del grado". A diferencia de Mieres y Gijón, que rechazan una sede compartida, la plataforma avilesina es favorable a esa fórmula colaborativa. Julián Fernández entiende que "está fuera de lugar" hacer pujas económicas para tentar a la Universidad", en alusión a la oferta de un millón de euros que lanzó Gijón.