"¿Cómo no van a estar desconcertados los familiares si hasta la abuela y la tía andaban pagando misas por Honorina? Es que la daban por muerta, y ahora aparece", ha asegurado esta tarde un vecino de Bimenes, que expresa la sorpresa que vive este concejo desde que anteayer se supiese que una vecina que llevaba desaparecida 26 años está en realidad en Buenos Aires, viviendo en la calle de la mendicidad.

¿Como llegó Honorina a Buenos Aires si lleva décadas sin carné de identidad ni pasaporte? Es la gran pregunta, llenar esa brecha sin información alguna. La última vez que Honorina Montes García visitó a su hermano Rubén y a su madre Dolores, Lola, fue en 1992. "Dijo que no quería saber más de nosotros y desde entonces no la hemos visto", asegura un desbordado Rubén, que realmente no sabe qué hacer, ya que está cuidando ya a una madre de 84 años con problemas de salud graves y duda que tenga fuerzas para hacerse cargo de una hermana con más que evidentes problemas psiquiátricos.

Rubén viajó a Madrid en busca de su hermana, que vivía entonces en la Gran Vía. Y un primo suyo de la Policía Nacional indagó su paradero. Solo pudo seguirle la pista hasta una provincia castellana. Los familiares sospechan que ingresó en una secta. Honorina, una mujer a la que le gustaba pasárselo bien, fan de los Rolling, también tenía su lado espiritual.

El alcalde de Bimenes, Aitor García, se ha puesto a disposición de la familia para lo que haga falta, pero el problema es que Honorina, Nori, es una persona libre a la que no se puede obligar a nada. Habría que empezar por incapacitarla, un proceso judicial que requiere unos trámites. Y una vez hecho esto, trasladarla a un centro adecuado en Argentina o repatriarla. La cuestión es la siguiente: si carece de documentación, muy posiblemente se encuentre en Argentina de forma irregular. Marcos Díez, primo de Rubén Montes, señala que no ve una solución fácil, "quizá muy a largo plazo".

La que se supone es Honorina Montes fue hallada por su familia gracias a una polémica viral en Argentina, ya que algunos medios de comunicación especulaban con si una mendiga de Buenos Aires podría ser la madres, desaparecida desde hace años, del cantante Luis Miguel. Toda la polémica surgió gracias a un trabajo de la artista y youtuber Malena Aballay, que reside cerca de la indigente y que desató el interés en los medios.

Sin embargo, en algunas conversaciones con periodistas, la indigente refirió lugares y expresiones típicas del concejo de Biemenes, lo que alertó a un internauta que terminó por interrogar en el pueblo de Tuenes, al que hacía referencia la mujer. Fue entonces cuando, al ver el vídeo de algunas entrevistas, el hermano de Honorina Montes reconoció a su hermana, que llevaba años desaparecida sin dejar rastro.