Los universitarios asturianos son los que más suspenden y los que menos rinden del país. Sólo uno de cada cuatro finaliza la titulación en el tiempo teórico previsto para ello. Así se desprende de los resultados recogidos en el ranking que elabora anualmente la Fundación Conocimiento y Desarrollo (CYD), que sitúa en las primeras posiciones en el ámbito nacional a las universidades Autónoma de Barcelona y Navarra. Junto a ellas, también sobresalen por sus tasas de rendimiento la Pompeu Fabra, en Cataluña y la Carlos III y Autónoma de Madrid, en la capital. De las 15 universidades mejor situadas en esta clasificación, diez son públicas y cinco privadas, y todas se reparten en cinco comunidades autónomas: Cataluña, Comunidad Valenciana, Madrid, Navarra y País Vasco.
La tasa de rendimiento en el Principado, que se define como la ratio entre los créditos aprobados y los matriculados, es del 73,9% frente a la media nacional de las universidades públicas, que se eleva al 76,4%, lo que lleva a Asturias a ocupar la penúltima posición en la evaluación por comunidades autónomas. Si el análisis se extiende a las universidades privadas el indicador de desempeño académico sube al 85,5%. Abundando en los malos resultados, no solo suspenden más sino que, como consecuencia de ello, los universitarios asturianos acaban más tarde que la media los estudios en los que se han matriculado. Así, el porcentaje de estudiantes que finalizan la titulación en el tiempo previsto únicamente representa el 27%.
Mejor parada sale la Universidad de Oviedo en la clasificación por comunidades si se atiende a cuestiones como su impacto económico en la región o la orientación internacional de la institución académica, donde ocupa la séptima y sexta posición, respectivamente. Como puntos fuertes de la institución docente asturiana el informe de la Fundación Conocimiento y Desarrollo señala, en el capítulo de investigación, el elevado número de publicaciones científicas por profesor y las publicaciones que se realizan tienen un carácter multidisciplinar, añade el informe. En transferencia de conocimiento, esto es, el impacto económico sobre el territorio, existe un buen número de patentes con empresas y de ingresos por licencias. En orientación internacional, aunque está pendiente de ampliar la plantilla docente de nacionalidad extranjera, hay abundantes grados y másteres con docencia en inglés y también se despunta en la Universidad asturiana por el número de publicaciones internacionales que ven la luz cada año.
En cifras globales, en el curso 2016-17, la Universidad de Oviedo sumaba 17.704 estudiantes de grado, 578 matriculados de máster, y vieron la luz 5.262 publicaciones científicas.
Además, en el curso 2015-16, de la factoría de la Universidad asturiana salieron al mercado laboral 3.303 egresados, el 1,6% de todos los titulados españoles. Si bien no representa una aportación sustancial en el ámbito nacional sí destaca el elevado porcentaje de los que promocionan superada ya la treintena, que en la Universidad de Oviedo representan el 12,7% de todos los egresados, una cifra solo superada por las regiones de Murcia y Castilla y León, donde llegan al 13 y el 17%, respectivamente.
