El personal investigador que integra la Colaboración Planck de la Agencia Espacial Europea (ESA) ha sido distinguido con el Premio Gruber de Cosmología 2018, que concede la prestigiosa Gruber Foundation, con sede en la Universidad de Yale, por su misión de cartografiado del fondo cósmico de microondas: la radiación reliquia del Big Bang que todavía se puede observar hoy en día. La Colaboración Planck cuenta entre sus integrantes con cuatro miembros de la Universidad de Oviedo: Luigi Toffolatti, catedrático del Área de Astronomía y Astrofísica; Francisco Argüeso, profesor titular del Área de Matemática Aplicada; Laura Bonavera, profesora ayudante doctora del Área de Física Aplicada; y Joaquín González-Nuevo, investigador "Ramón y Cajal" del Departamento de Física.

El satélite científico Planck, bautizado así en honor del físico alemán Max Planck (1858-1947), premio Nobel de Física en el año 1918, fue lanzado al espacio el 14 de mayo de 2009 mediante un cohete Ariane 5 de la ESA, desde la base de Kouru en la Guyana Francesa. Planck observó el cielo durante más de cuatro años, hasta octubre de 2013, y ha proporcionado los mapas más precisos de todo el cielo en las microondas, utilizando nueve canales diferentes de observación.

Como destaca el comunicado oficial de la Gruber Foundation: "Planck ha conseguido medir con precisión sin precedentes el contenido de materia y energía y la geometría del universo. Ha medido además las huellas dejadas sobre la radiación cósmica del fondo de microondas (CMB) por el gas caliente presente en los cúmulos de galaxias y el efecto gravitatorio debido a las estructuras observadas a gran escala en el universo y ha puesto vínculos muy estrictos a las propiedades de una hipotética fase de `inflación´ primigenia. Finalmente, ha fijado también con alta precisión la época de formación de las primeras estrellas y ha conseguido una información inigualable sobre la distribución del polvo interestelar -sus propiedades físicas y de emisión de energía- y sobre los campos magnéticos en nuestra Galaxia".

El galardón reconoce a "personas cuya investigación inspira y permite cambios fundamentales en el conocimiento y la cultura". Se trata de uno de los galardones más importantes que se otorgan en Física a nivel internacional, dotado con 500 mil dólares, de los cuales los dos investigadores principales, el italiano Nazzareno Mandolesi y el francés Jean-Loup Puget, recibirán 125 mil dólares cada uno, mientras que 250 mil se repartirán entre los demás miembros de la colaboración, integrada actualmente por unos 250 investigadores e investigadoras de diferentes centros de investigación e instituciones académicas de Europa y del resto del mundo.

El presidente de la Junta Asesora de Selección del Premio, Robert Kennicutt, de la Universidad de Arizona, señala que "el proyecto Planck ha realizado mediciones definitivas de las propiedades de nuestro universo en expansión. Este asombroso logro fue el resultado de un gran esfuerzo colectivo, y nos complace reconocer tanto al equipo de Planck como a sus principales líderes del equipo científico".

Por su parte, Günther Hasinger, director de Ciencias de la ESA, afirma que "la misión ESA Planck ha hecho contribuciones verdaderamente fundamentales a nuestra comprensión de la cosmología moderna. Es un gran placer felicitar y agradecer a los cientos de científicos e ingenieros que han hecho posible este excelente éxito".

En el marco de la Colaboración Planck, el personal investigador de la Universidad de Oviedo se ha ocupado de diferentes temas científicos y análisis específicos como la detección de objetos compactos (galaxias) en los mapas de todo el cielo proporcionados por el satélite Planck; la creación de catálogos de estas galaxias, clasificándolas en base a sus características de emisión de radiación; o el estudio de las propiedades de emisión y de evolución de las galaxias observadas.