La Consejería de Sanidad del Principado ha ejecutado el cese del ingeniero mierense Luis Díaz López como director del Instituto Nacional de Silicosis. El Departamento que dirige Francisco del Busto firmó esta decisión el pasado viernes, día 25, una resolución que hoy publica el Boletín Oficial del Principado (BOPA).

La medida ha sido adoptada justo un día antes de que venciera el ultimátum que el juez había dado a Del Busto, a quien había amenazado con multas económicas personales si no ejecutaba la anulación del nombramiento por defectos formales.

Luis Díaz López fue nombrado director del Instituto Nacional de Silicosis el 31 de marzo de 2017. Esta decisión fue anulada por el titular del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 4 de Oviedo, David Ordóñez Solís, en sentencia del 19 de septiembre de 2017, debido a la falta de valoración de los méritos de los siete candidatos que optaban a la plaza (cinco ingenieros y dos médicos).

Dado que el Servicio de Salud del Principado (Sespa) no ejecutó esta resolución tal y como la misma estipulaba, el mismo juez dictó un nuevo auto el pasado 20 de marzo que reiteraba la anulación del nombramiento y ordenaba a la comisión de valoración de los candidatos a la plaza que "establezca de manera objetiva un baremo de méritos" que justifique por qué fue el aspirante elegido.

El pasado 26 de abril, de nuevo el magistrado David Ordóñez emitió un auto en el amenazaba con multar al consejero de Sanidad del Principado, Francisco del Busto, si "en el plazo máximo de un mes" no destituía al director de Silicosis "nombrado ilegalmente". La resolución hablaba de imponerle "multas coercitivas" por importe de "500 euros, 1.000 euros y 1.500 euros, por cada mes que transcurra" desde la notificación de esta resolución.

Según Conceyu por Otra Función Pública n´Asturias, "en cualquier país democrático un escándalo de esta magnitud obligaría a dimitir de forma fulminante a los responsables políticos del mismo. Aquí, serán convenientemente protegidos y recompensados. Así nos va".

A juicio de Conceyu, el Sespa pretendió dar por ejecutada la sentencia convalidando el nombramiento previamente anulado, pero el Juzgado advirtió que dicha convalidación sólo pretendía mantener a la persona previamente designada, pues la comisión de valoración volvió a proponer al mismo candidato, reinterpretando las bases y adaptándolas a su perfil.

El Instituto Nacional de Silicosis abrió sus puertas en 1970 para atender los severos daños de salud que sufrían los mineros. La silicosis es una enfermedad pulmonar causada por inhalar polvo de sílice y que puede llegar a causar la muerte.

Durante más de 25 años, Silicosis estuvo integrado en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). La decisión de dar autonomía al Instituto fue adoptada por el Gobierno regional del PSOE para cumplir lo acordado con IU en el marco del pacto de investidura del Presidente regional, Javier Fernández. Actualmente, una vez que ha sido desgajado del complejo sanitario de Oviedo y ha recuperado su personalidad jurídica propia, la Consejería de Sanidad pretende emprender una etapa de "crecimiento sostenido en cuanto a servicios y áreas geográficas", según recoge el plan estratégico elaborado recientemente por la propia entidad.

"Volvemos al pasado"

Pere Casan, director del área de gestión clínica del Pulmón del HUCA, a la que pertenecía Silicosis, se ha mostrado muy crítico con todo este proceso. A su juicio, "volvemos al pasado" y "recreamos una entidad y la dotamos con todo lo que se nos negó en estos años".

Entre tanto, Gaspar Llamazares, portavoz parlamentario de IU de Asturias, había declarado que el Gobierno asturiano "tiene que despejar el futuro de la dirección de Silicosis cumpliendo las sentencias judiciales, saliendo de la rebeldía en la que está, y en segundo lugar, tiene que desarrollar la autonomía de Silicosis como centro de referencia y dejar de hablar de ella sin hacer nada".