"Vivir en Somiedo es un privilegio". Lo dijo Rosalía Garrido, presidenta de la Asociación de Hostelería de Somiedo, y le secundaron el resto de participantes en el Conceyu Abiertu organizado por LA NUEVA ESPAÑA y que tuvo lugar ayer en Pola de Somiedo con motivo del trigésimo aniversario de la declaración de Parque Natural del concejo.

Los participantes en el debate, moderado por la periodista María José Iglesias, analizaron ámbitos como la hostelería, la ganadería, la administración, la etnografía y la empresa, y coincidieron en sentirse orgullosos por lo que se ha conseguido en estos treinta años. Pero también ambiciosos y preocupados por el futuro y por los desafíos que se les plantean para fijar población y para seguir avanzando en el desarrollo de uno de los lugares más emblemáticos de Asturias.

Uno de los grandes atractivos y que constituye un referente de Somiedo es la conservación del oso pardo. En ese sentido, Guillermo Palomero, presidente de la Asociación Oso Pardo, destacó el "ejemplo" que ha supuesto el Parque Natural en la convivencia de "ganadería, población de osos y animales carnívoros". "No nos cansamos de señalar que este Parque Natural ha sido un modelo para otras partes de la cordillera cantábrica", añadió.

Palomero también destacó la importancia que puede tener el turismo de avistamiento de osos, que necesita de ordenación: "Si Somiedo fue referente en la conservación del oso tiene que ser referente en este turismo de avistamiento, que ahora está todavía un poco desorganizado", explicaba.

Para Rosalía Garrido, uno de los grandes problemas que afronta el concejo es el "envejecimiento de la población" y advirtió de que no hay tiempo que perder: "Nos tenemos que poner las pilas ya". Entre las ideas que puso sobre la mesa estuvieron "crear una industria de transformación cárnica" y construir una "residencia de ancianos, que daría trabajo y que es necesaria".

Fernando Alonso, director del Parque Natural, calificó a Somiedo como "un sitio especial". "Vienen de otras partes para ver qué hay singular aquí", añadió. Para él, este trigésimo aniversario "es un buen momento para pensar en el futuro sin alejarse de la esencia del concejo. La creación del Parque Natural fue un hecho histórico".

El presidente de la Fundación Oso Asturias y de la Fundación EDP, Nicanor Fernández, insistió en calificar la constitución del Parque Natural como "una historia de éxito", pero también apostó por "no caer en la autocomplacencia". En su opinión, Somiedo "no va a poder crecer indefinidamente" y por eso conviene hacer "una apuesta por la calidad". "La gente que viene a Somiedo tiene que gastar más y para eso tiene que tener mejores servicios".

Los ganaderos estuvieron representados por Simón López, quien aseguró que "hablar de Somiedo es hablar de vacas, brañas, teitos, de un sistema tradicional". En su asociación hay más de cien socios que tienen 7.000 vacas y al margen de ella hay otras 2.000 en el concejo. Por su parte, la secretaria de la Asociación de mujeres y directora del Ecomuseo, María Teresa Lana, quiso poner en valor la riqueza etnográfica del concejo: "El patrimonio etnográfico es tan valioso como el natural. La conservación del oso pardo ha sido un éxito, ahora le toca a la etnografía". Por último, el Alcalde, Belarmino Fernández, destacó los cambios que ha vivido el concejo: "La democracia trajo el desarrollo rural, hace 40 años Somiedo era la carretera general y poco más".