Nuevo colapso en la autopista "Y", esta vez por la caída de un pino de grandes dimensiones, que llegó a cortar los dos carriles en sentido a Avilés desde Gijón y Oviedo, a la altura del nudo de Serín, poco antes de las seis y media de la tarde de ayer. El árbol se desprendió sobre la calzada tras producirse un pequeño argayo, posiblemente por las lluvias de estos días y el viento que se levantó en la jornada de ayer, antes de la fuerte tormenta que se desató a última hora de la tarde.

La circulación por los dos carriles no se reabrió hasta las ocho menos veinte de la tarde, y hubo que esperar un poco más, hasta las ocho, para que la circulación se normalizase. La Guardia Civil de Tráfico dio cuenta de que las retenciones habían alcanzado los tres kilómetros en sentido a Avilés y el occidente, y un kilómetro en sentido a Gijón.

Quejas de los usuarios

El accidente s eprodujo en el kilómetro 393 de la A-8, cerca de la gasolinera del Montico. Nada más producirse la caída del árbol se formó un atasco tal que muchos conductores llegaron a salir de sus coches ante la total falta de movimiento en la autopista. Mucha gente se indignó porque tenía entradas para el Niemeyer y el colapso les impedía llegar a tiempo. Otros usuarios se quejaron de que los carteles de la autopista no advirtiesen a los conductores de la incidencia que se estaba produciendo, lo que les hubiese permitido desviarse de la carretera y evitar el colapso.

A la zona se desplazaron patrullas de la Guardia Civil de Tráfico de Oviedo y Gijón con el fin de ordenar el caos que se había producido. Los Bomberos y los empleados de Mantenimiento de Carreteras también se personaron rápidamente en la zona del desprendimiento. Hubo que trocear el árbol, que medía más de siete metros de longitud. Primero se retiró la copa, permitiendo la apertura de un carril para que se fuese aliviando el tráfico colapsado. Finalmente, a las ocho menos veinte de la tarde se había retirado por completo y la circulación se fue normalizando.

Las carreteras del centro de la región están viviendo unos días intensos. Las fuertes lluvias caídas anteayer por la tarde causaron varios accidentes e importantes retenciones que colapsaron tanto la autopista "Y" como los accesos a Oviedo durante la tarde.

Por otro lado, el lunes de esta semana, quedó interrumpido el servicio de trenes entre Villabona (Llanera) y Serín (Gijón) después de que un tren Alvia de Renfe, procedente de Madrid, sufriese un accidente tras caer un árbol sobre la catenaria e impactar contra él. Aunque el accidente generó un importante trastorno al servicio ferroviario, no hubo que lamentar graves daños personales entre los pasajeros, aunque el maquinista resultó herido, de carácter leve, tras romperse el cristal de la cabina fruto del impacto.