Cerca de cuarenta minutos de entrega de diplomas. Los más de doscientos graduados de la Facultad de Filosofía y Letras pasaron ayer por el escenario del Auditorio Príncipe Felipe para recibir las acreditaciones de este fin de camino académico que no es otra cosa que inicio de ruta profesional. "Podéis responder a los desafíos formativos" de la sociedad, les animó el rector de la Universidad de Oviedo, Santiago García Granda.

"Talento y valores", conjunción perfecta para abordar el futuro con confianza, en un mundo tan heterogéneo que hizo saltar por los aires aquella vieja idea de que los graduados en Humanidades tienen acomodo casi exclusivo en el área de la enseñanza y, unos pocos, en la investigación.

Ya nada es así, como recalcó la catedrática de Filología Románica, Ana Cano. "Falta mucho por recorrer, pero vais a andar por sendas profesionales que eran inexistentes hace veinte años", les dijo a sus alumnos, Para ellos su mensaje final: "No hay nada más enriquecedor que poder dedicarse a lo que uno le gusta".

Recogieron sus diplomas los estudiantes graduados de Lengua Española, Geografía y Ordenación del Territorio, Historia, Historia del Arte, Historia y Ciencias de la Música, Filosofía, Estudios Ingleses, Lenguas Modernas y Lenguas Clásicas y Románicas. Para todos, además, la beca azul de las Humanidades y los consejos del decano de la Facultad, José Antonio Gómez: "El trabajo es el punto de apoyo para mover el mundo. No os rindáis nunca, no compréis valores seguros y de vez en cuando es bueno dar puntadas sin hilo".

Lo dice el principal responsable de una Facultad que engloba estudios muy diversos y complementarios y que es -recordó Gómez- el segundo centro en número de alumnos y titulaciones de la Universidad de Oviedo.

Quedó bien reflejado en el acto de ayer, con tanto estudiante y tantos amigos y familiares que practicamente llenaron el Auditorio ovetense. María, alumna de Lenguas Modernas, y Alejandro, de Geografía, pusieron voz a los nuevos graduados, con un recordatorio especial, el de dos grandes profesores que nos dejaron recientemente. Dalia Álvarez Molina, de Filología Francesa, y Francisco Quirós Linares, referente nacional en Geografía.

En el acto intervino también Enriqueta Valdés, directora de la Fundación José Cardín, entidad colaboradora de la Facultad.

El fin de fiesta lo protagonizó a la guitarra Jerónimo Granda, antiguo alumno de la Facultad. "A mí, plin; yo no fui, fue Urdangarín". Y el auditorio, feliz.