La lavandería de ropa de los hospitales asturianos que proyecta la Consejería de Sanidad del Principado podría dar servicio también a las residencias de mayores del ERA. Así lo ha explicado a este periódico el titular de Sanidad, Francisco del Busto, quien agregó que el presupuesto estimado por la Administración para este equipamiento oscila "entre diez y doce millones de euros".
Del Busto admite que esta instalación no podrá ser materializada en lo que resta de legislatura (menos de un año: las próximas elecciones autonómicas están previstas para mayo de 2019). "Lo que sí es viable es que el proyecto esté bien perfilado y que el suelo esté comprado de aquí a un año", indicó el Consejero. Del Busto precisó que aún no está decidida la ubicación, aunque se dará prioridad a que sea una zona "en el centro de Asturias, amplia, bien comunicada y con buenos accesos", con el fin de facilitar tanto la recogida de ropa como su posterior distribución.
El pasado miércoles, Francisco del Busto hizo público que su Departamento estudia centralizar el servicio de lavandería en un nuevo equipamiento que permita dar cobertura a todo el sector sanitario público. Actualmente existen dos lavanderías: una en el Hospital Universitario de Cabueñes, en Gijón, y la otra en el complejo hospitalario del Cristo en Oviedo (en lo que era el viejo HUCA). En ambos casos, se trata de "instalaciones obsoletas que en pocos años necesitarán inversiones importantes para su continuidad", argumentó el titular de Sanidad. Entre seis y siete millones de euros de desembolso podría exigir la reforma de estos equipamientos. Además, la lavandería del viejo HUCA está emplazada en terrenos que ya no pertenecen a la Administración regional, sino a la Tesorería de la Seguridad Social.
Otra limitación relevante de los equipamientos actuales se centra en que no tienen capacidad suficiente para asumir el tratamiento de la ropa sanitaria de toda la región: un promedio aproximado de 6.500 toneladas al año. En el momento actual, de esta actividad, el 40 por ciento se realiza en la lavandería de Oviedo; el 30 por ciento, en la de Gijón; y el resto de modo externalizado a través de varias licitaciones diferenciadas por áreas sanitarias.
Gracias a que estará dotada "del máximo nivel de automatización", la planta que Sanidad aspira a poner en marcha estaría en disposición de gestionar mayores cantidades de ropa: entre 10.000 y 12.000 toneladas al año, cifras que sobrepasan las necesidades de la red hospitalaria. Por eso Sanidad prevé ofertar el servicio al organismo Establecimientos Residenciales de Ancianos (ERA) para tratar la ropa que generan las residencias dependientes de la Consejería de Servicios y Derechos Sociales.
Una relevante novedad de la futura planta consiste en que dispondría de un gran almacén de ropa limpia del que se carece actualmente. Esta innovación permitiría, según los responsables sanitarios, "establecer una buena planificación, asegurar el servicio atendiendo las necesidades de cada centro y mejorar los costes".
De otro lado, agregan las autoridades del Principado, una nueva instalación "sería más eficiente". ¿De qué modo? Reduciría tanto el consumo de electricidad como el de agua, esto último gracias a los nuevos equipos de túneles de lavado que mejoran un 80 por ciento su rendimiento con respecto a los actuales. "Tanto el personal como la gestión continuarán siendo públicos", subrayó el consejero de Sanidad en declaraciones a LA NUEVA ESPAÑA.
Visita en París
La construcción de una nueva lavandería fue incluida inicialmente en el proyecto del nuevo HUCA en los terrenos de La Cadellada. Finalmente, no se llevó a la práctica. "Llevamos tiempo estudiando diferentes opciones, y los informes técnicos avalan la alternativa de centralizar en un solo equipamiento ese servicio de lavandería", indicó el consejero de Sanidad. Del Busto resume así la idea global: "Un nuevo centro moderno y dotado con la última tecnología. Por lo tanto, mucho más eficiente, un centro limpio y que, al igual que los actuales, sería de gestión púbica y con personal propio".
El titular de Sanidad estuvo días atrás en París visitando dos lavanderías de gestión pública. Allí tuvo la oportunidad de "conocer in situ el funcionamiento de un equipamiento que podría ser un modelo a tener en cuenta en el proyecto que estamos estudiando para Asturias".
