Jarro de agua fría para la educación concertada. La ministra de Educación, Isabel Celaá, anuncia que la red pública tendrá preeminencia sobre la privada y reniega de las cuotas "voluntarias" que se pagan en este tipo de centros. Juan Luis González, secretario general de la Organización de Trabajadores de Enseñanza Concertada de Asturias (OTECA), defiende que ambos tipos de educación "son complementarias la una de la otra", pero considera que "la libertad de los padres a la hora de elegir el centro para sus hijos está salvaguardada". "Pienso que esto no es más que un brindis al sol", dijo. Además, González explica que él tampoco está a favor de las cuotas pero "son necesarias para financiar un sistema que no cubre la Administración".

Respecto a otro de los anuncios de Celaá, que la Religión deje de hacer media con el resto de materias, el portavoz de OTECA asegura que "nos parece que no debe haber asignaturas de segunda". Los que sí se han tomado con optimismo las medidas anunciadas por el Gobierno son los sindicatos educativos asturianos, satisfechos con la derogación del real decreto 14/2012, que aumentó la jornada lectiva de Primaria y Secundaria. Celaá ya ha anunciado su derogación inmediata. "Ya era hora, y a ver si es verdad, lo ideal sería que se pusiese en marcha para este próximo curso", asegura Gumersindo Rodríguez, secretario general de ANPE. "Es muy importante que se dé marcha atrás, hay que eliminar ese real decreto que tanto daño nos hizo, tanto al funcionamiento de los centros como a los docentes", explica Maxi Fernández Otero (UGT). Borja Llorente, de Comisiones Obreras, también mostró su satisfacción con este anuncio y añadió que hay otros cambios positivos, "el fundamental es recuperar la democracia en los consejos escolares, que volverán a elegir democráticamente a los directores, y no será una decisión de una comisión representada por la Administración".