El "pacto del Narcea", rubricado entre Cadasa y Arcelor-Mittal para garantizar el suministro de agua en el centro de Asturias y desvelado por LA NUEVA ESPAÑA el pasado 29 de abril, ha recibido las bendiciones de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico. El organismo de cuenca ha autorizado el contrato de cesión de derechos del agua del río Narcea, lo que da "luz verde" a la constitución de una comunidad de usuarios, tal y como han pactado el Consorcio de Aguas de Asturias y la multinacional siderúrgica. La autorización será elevada a la junta de gobierno de Cadasa en su próxima reunión.
Fuentes de la Confederación ya habían adelantado a este periódico hace varias semanas su más que posible respuesta positiva al "pacto del Narcea", al señalar que era "una idea magnífica" y "una gran solución". El organismo estatal sostuvo que utilizar el agua del canal del Narcea, propiedad de Arcelor, para complementar la aportada desde el río Nalón por Cadasa era "la solución perfecta" al suministro de agua al centro de Asturias. La Confederación manifestaba así su respaldo "pacto del Narcea", rubricado hace varias semanas por el consejero de Medio Ambiente, Fernando Lastra y representantes de Arcelor.
Pero el organismo autónomo, responsable de la administración hidráulica de las cuencas del Cantábrico, aún tenía que revisar si la cesión de derechos cumplía las normas vigentes. Ha concluido que sí. Cadasa y Arcelor tienen ahora dos años para constituir la comunidad de usuarios, en la que también participará el Ayuntamiento de Avilés. La Confederación tendrá también la última palabra en este caso.
El acuerdo alcanzado por Cadasa y Arcelor permite al Consorcio utilizar las aguas del Narcea y el canal del mismo nombre para abastecer al área central de la región, a sus habitantes y a sus industrias. A la vez, las aguas del Nalón, cuyo concesionario es Cadasa, surtirán a la factoría de Veriña de Arcelor. En las actuales circunstancias de población y entramado industrial, el histórico "pacto del Narcea" satisfará las necesidades hídricas del centro de Asturias "de por vida", según los cálculos de Cadasa.
El "pacto del Narcea" zanja un enconado debate que ha ocupado a las autoridades y a la sociedad civil durante años, el de hallar la mejor solución para garantizar el suministro de agua y al área más poblada de Asturias. Y lo hace sin necesidad de construir embalses como el de Caleao, defendido durante años por algunos sectores del PSOE asturiano.
Todos ganan con el acuerdo: Cadasa podrá utilizar hasta 530 litros por segundo en la toma de Ablaneda, salvo que resulte imposible por limitaciones de la Confederación, y el Principado colaborará con la siderúrgica en el mantenimiento del canal.
El gerente de Cadasa, Julio Pérez, sostiene que con el acuerdo, en situaciones extraordinarias de avería o escasez en el sistema actual de suministro desde Tanes y Rioseco, con origen en el río Nalón, podrá incorporar agua del Narcea a su red y servir a partir de la estación de tratamiento de Ablaneda, a toda la zona costera central de Asturias, mejorando así la garantía del suministro.
