El presidente de la Federación de Peñas de la pólvora, José Antonio Fernández, asegura que el incidente ocurrido durante la tirada nocturna de la noche del sábado "no se puede valorar en caliente". Para Fernández, la explosión de los voladores en la máquina del Prao del Molín ha sido "producto de la casualidad, algo fortuito", que asegura que tendrá que analizarse una vez que haya transcurrido un tiempo.
"Lo importante es que las medidas de seguridad y protección han funcionado, si no existiese el cinturón de seguridad que marca el Plan tendríamos que hablar de otra historia", recalcó Fernández.
Aunque reconoce que es posible que se tenga que revisar la planificación de las tiradas, pero insiste en que la noche del sábado "no se hizo nada que no se hubiera hecho en otras tiradas". La explosión supuso la cancelación del espectáculo nocturno, pero también de la tirada en honor a Santa María Magdalena, la patrona de Cangas, durante la procesión de ayer. A ella, llevan años dedicándose los componentes de la peña "La Magdalena" que lamentan que este año no hayan podido tirar ni un volador en su honor. "Fue una tristeza, pero tocaba cancelar la tirada", asegura el presidente de la peña Ricardo Lache que subrayó que lo importante del día de ayer era celebrar que los daños habían sido materiales y "se cumplió el dicho de que nun se manque naide y que solo haya habido heridos leves". A cambio, los componentes de la peña participaron de la procesión y el propio presidente formó parte de la comitiva que portaba la santa durante una parte del camino.
