El Partido Popular de Asturias vuelve esta tarde a la gestión ordinaria en la primera reunión del comité ejecutivo autonómico después del congreso que oficializó el relevo al frente del partido en una dirección contraria a la que había respaldado la cúpula regional de la organización. La presidenta de los populares asturianos, Mercedes Fernández, presidirá el órgano de gobierno por primera vez desde que el pasado sábado la votación de los compromisarios acreditados en el cónclave otorgó la presidencia a Pablo Casado por delante de Soraya Sáenz de Santamaría, apuesta de última hora de la dirección asturiana. El análisis de situación del partido tras el cónclave y las repercusiones de las posiciones que en Madrid defendieron unos y otros marcará el encuentro de hoy junto a las primeras tareas señaladas en la agenda inmediata del nuevo presidente, que al decir de la líder asturiana tendrían que plantear el abordaje de una necesaria y profunda "renovación" en las juntas locales.

Esta cuestión espinosa promete un hondo debate en el interior de la organización de cara a las citas electorales del próximo año y que será el gran medidor de fuerzas del sector oficialista y de los que le son menos afines.