El palacio de la Moncloa será el escenario en el que el presidente del Principado, Javier Fernández, se encuentre por primera vez un Pedro Sanchez presidente del Gobierno. Un sorprendente e impensable lugar de encuentro hace solo unos meses pero al que el jefe del Ejecutivo regional trasladará las principales preocupaciones y necesidades para Asturias: la transición energética, la financiación autonómica y las infraestructuras.
En estas dos cuestiones coincidirá con los presidentes que le antecedieron en esta serie de encuentros, principalmente con el de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, y de Andalucía, Susana Díaz. El presidente de Cataluña, Quim Torra, también planteó la cuestión competencial, además de la financiación y la inversiones, una vez que tuvo claro que las reivindicaciones independentistas no tenían cabida. El jefe del ejecutivo del País Vasco, Íñigo Urkullu, se centró en el traspaso de competencias y la política penitenciaria -el sistema de financiación autonómica no le afecta-.
Javier Fernández reclamará al Gobierno central que negocie con la Comisión Europa prorrogar la actividad minera hasta el 31 de diciembre, que mantenga la actividad de las centrales térmicas con una planificación a medio y largo plazo de clausuras y que se modifique la ley para que la decisión última sobre cierres le corresponda al Gobierno y no a las empresas.
Negociar la financiación autonómica en el Consejo de Política Fiscal y Financiera y aprobarla en esta legislatura, es clave para el presidente asturiano. Fernández reclama un modelo solidario y basado en el cálculo la cobertura de las necesidades de gasto y no en las capacidades fiscales del territorio. La variante ferroviaria de Pajares, el plan de cercanías y la participación del Estado en la Zalia, son otros asuntos cruciales.
