"Nuestro padre nos deja un extraordinario legado", recordó ayer al final de la ceremonia religiosa Francisco Pañeda Usunáriz, hijo del médico ginecólogo jubilado Francisco Pañeda, al que familia, amigos y compañeros despidieron en la iglesia de los Santos Apóstoles, en Oviedo. Pañeda falleció anteayer en la capital asturiana a los 73 años.

Un legado inmaterial y de gran valor que está compuesto de talento, honestidad, discreción, una enorme capacidad de trabajo y una generosidad a prueba de bomba. Pañeda Usunáriz, que es magistrado de la sección número 3 de la Audiencia Provincial de Valladolid, terminó sus palabras de agradecimiento en nombre de toda la familia (entre ella, Alfredo Martínez, jefe de protocolo de la Casa Real, yerno del fallecido), con unos versos de Santa Teresa de Jesús: "Nada te turbe, / nada te espante, / todo se pasa, / Dios no se muda. / La paciencia / todo lo alcanza; / quien a Dios tiene / nada le falta: / sólo Dios basta".

En su homilía el párroco José Luis Pascual habló de Francisco Pañeda y de ese último combate contra la enfermedad "que él vivió de forma admirable demostrando su calidad como ser humano". Dios, señaló Pascual, "lo hizo pequeño y humilde, y por eso tiene las puertas abiertas en el Cielo".

Funeral en Gijón

A pesar de la época vacacional la iglesia del barrio de Buenavista se quedó pequeña en el funeral que precedió a la incineración de Francisco Pañeda en la intimidad familiar. Mañana se celebrará en Gijón (iglesia de los Carmelitas, en Begoña, a las cinco de la tarde) otra misa funeral.

En los bancos y sillas del templo de los Santos Apóstoles, muchos profesionales de la Medicina. Por citar tan solo a cuatro, Fernando Vázquez, catedrático de Microbiología; el oftalmólogo Luis Fernández-Vega Sanz; el otorrino Carlos Suárez, o el neurólogo Carlos Hernández Lahoz.

Junto al párroco José Luis Pascual, concelebraron José Antonio Bande, Salvador Tejedor, José Carlos Seijo y Carlos García.

El arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, envió desde Austria, donde asiste a un congreso obispal, un mensaje de condolencia. "Doy fe de la grandeza humana de este médico cristiano", señaló el arzobispo.