Los muebles "low cost", de bajo coste y similar calidad, han inundado el mercado en los últimos años. Y el sector quiere atajar una tendencia a la que se han amoldado tanto los fabricantes como los consumidores lanzando un mensaje contundente: "Un buen mueble es clave para tener una buena salud".
La idea la expuso Alberto González García, presidente de la coordinadora nacional de los Agentes Comerciales del Mueble, durante la celebración del día del sector en la Feria Internacional de Muestras, que también sirvió para presentar la edición del año que viene de la feria "Normueble". González destacó que el sector empieza a mejorar poco a poco gracias a un repunte en la construcción, si bien los resultados empezarán a verse a más largo plazo. Pero aún así "existe todavía preocupación porque el mueble ha perdido puestos en el ranking de preferencias de los consumidores, y queremos que la gente tenga presente que un mueble no sólo es un artículo de decoración sino que forman parte de la salud del ser humano", asevera.
Es más, "una cama, una butaca o una silla normalmente tienen una incidencia tremenda en la salud de las personas", recuerda Alberto González, quien sostiene que "muchos lumbagos y dolores de espalda tienen que ver con los muebles que se utilizan; hay muchas bajas en las empresas que se podrían evitar si se contara con muebles de buena calidad", asegura.
Es más, "tenemos que tener en cuenta también que el hecho de tener una casa cómoda, agradable y accesible hace que la gente disfrute del hogar y no tenga tanta ansia de viajar fuera", defiende el representante de los agentes.
Por todo ello, ayer formuló el llamamiento a comprar "buena calidad, porque a la larga sale más económico que cuando se gasta poco".
