Se acabarán las llamadas a los pacientes por sus nombres de pila y otros modos de hacer que siembran de indiscreción los centros sanitarios. El Servicio de Salud del Principado (Sespa) anunció ayer que extenderá a todos los hospitales el sistema de direccionamiento de pacientes, que contribuye a preservar su identidad. La implantación de este sistema en los centros que aún no lo tienen supondrá una inversión cercana a los 400.000 euros. Permite gestionar los turnos y las esperas en las consultas ambulatorias, las áreas de urgencias y la información a familiares. Asimismo, el consejo de administración del Sespa aprobó destinar 284.350 euros a la adquisición de un mamógrafo digital con tomosíntesis para el Hospital Carmen y Severo Ochoa, de Cangas del Narcea.