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En Valencia aspiran todavía a una quita mayor por el Estado

El acuerdo entre el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, y Pedro Sánchez no es suficiente para Compromís, socio de gobierno. La coalición buscará por su cuenta en Madrid un trato mejor con el que sacar pecho en la próxima campaña autonómica. El pacto se ha traducido en la asunción por el Estado de una deuda de 350 millones del Consorcio Valencia 2007, creado para construcción de las infraestructuras de la Copa América de vela en La Marina, y en medidas de diversa índole que, en total, suman 850 millones de euros. Ximo Puig "vendió" esos logros para justificar el cambio de voto de la Generalitat valenciana sobre la senda de déficit en el Consejo Política Fiscal. El alcalde valenciano, Joan Ribó, de Compromís, tachó de "insuficiente" la deuda asumida por el Estado pese a suponer el 77% del total. El gobierno asturiano pedirá "una explicación clara y transparente" sobre ese acuerdo Estado-Comunidad Valenciana, que no se abordó en el órgano multilateral del Consejo de Política Fiscal. Mientras, los partidos de la oposición en Asturias reprochan al ejecutivo regional que no meta más presión al Gobierno central con el objetivo de evitar un trato discriminatorio para la región.

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