El cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, se manifestó ayer en Covadonga dispuesto a atender las peticiones de la familia de Francisco Franco sobre el destino de sus restos cuando el cadáver sea exhumado de su actual ubicación en el Valle de los Caídos. "Siempre he dicho que todo lo que pida la familia lo haré, es un bautizado, un cristiano y tengo la obligación de acogerlo donde digan ellos", aseveró Osoro al ser preguntado sobre la posibilidad de que la familia Franco le plantease sepultarlo en la catedral madrileña de La Almudena junto a su hija, Carmen.

El prelado realizó estas declaraciones a TPA tras inaugurar la novena en honor a la Virgen de Covadonga, que se prolongará hasta el próximo 7 de septiembre -víspera de la festividad de la Santina- con la presencia de varios obispos españoles al conmemorarse el centenario de su coronación.

Unas 2.000 personas -treinta autobuses, así como decenas de coches particulares- asistieron en la tarde de ayer a la primera jornada del novenario, que en esta edición lleva por título "María, Madre y Reina", lema, del mismo modo, del Año Jubilar Mariano que concluirá el próximo día 8 de septiembre, festividad de Nuestra Señora de Covadonga. En esta ocasión estuvieron representadas las parroquias de San Nicolás de Bari (Avilés), Nuestra Señora de las Mareas (Avilés), Villaviciosa, San Juan de Ávila (Avilés), San Juan El Real (Oviedo), San Cipriano de Pillarno, San Martín de Laspra (Piedras Blancas), San Martín de Podes, San Martín de Collera, San Pedro de Villamayor, Onís y San Pedro de Sevares, entre otras.

La Princesa y el árbol

Uno de los protagonistas en el santuario de Covadonga fue el padre Ángel, al frente un grupo de 55 personas, la mayoría de ellas "sin techo", que se desplazaron a Asturias desde la iglesia madrileña de San Antón. "Es el primer año que venimos en peregrinación a la Santina", explicó el fundador y presidente de la ONG Mensajeros de la Paz, momentos antes de postrarse a los pies de la Virgen. "En Covadonga están las raíces de la Cruz de los Ángeles, emblema de Mensajeros de la Paz", añadió el sacerdote mierense.

Con motivo del centenario de la coronación canónica de la Virgen de Covadonga, algunos devotos de la Santina esperaban que la Cruz de la Victoria, seña de identidad del Principado, que fue donada a la catedral de San Salvador de Oviedo por el rey Alfonso III el Magno, en el año 908, tuviese presencia en el santuario mariano, tal como aconteció hace un siglo. "No, no estará", desveló Jesús Sanz Montes, arzobispo de Oviedo. El 24 de octubre de 2008 fue la última vez que estuvo en Covadonga, con ocasión del Año Santo de la Cruz.

En la misa de ayer, el cardenal Osoro -arzobispo de Oviedo entre 2002 y 2009- estuvo acompañado del arzobispo de Oviedo y del obispo de Plasencia, José Luis Retana. También concelebró el abad de Covadonga, Adolfo Mariño, así como por un numeroso grupo de sacerdotes. La faceta musical corrió a cargo de la Escolanía de Covadonga. Hoy, viernes, la misa de la novena será presidida por el obispo de Plasencia a partir de las 18.00 horas.

Por otra parte, José Luis Galán, veterano jardinero de Covadonga, aguarda la propuesta que traslado al alcalde de Cangas de Onís para gestionar ante Protocolo de la Casa Real que la Princesa de Asturias, doña Leonor, plante un árbol en el Jardín del Príncipe, como hicieron el 8 de septiembre de 1918 el rey Alfonso XIII, y su esposa, Victoria Eugenia de Battenberg, al inaugurarse el Parque Nacional de la Montaña de Covadonga. "Esperamos a la Casa Real a que nos dé permiso. Si nos autorizan, tiraría más por un castaño", señaló Galán.