Los dueños de Igrafo niegan haber eludido los impuestos sobre sociedades y el IVA -en fechas comprendidas entre 2006 y 2008- porque alegan que nunca se ocuparon de los asuntos fiscales al carecer de formación tanto en esta materia como en la administración de empresas. "En cuarenta años de trabajo nunca tuve relación con ese tipo de asuntos", explicaba Víctor Manuel Muñiz poco antes de entrar en la sala.

"Todavía no se porque estamos metidos en este lío. Las ventas a la Administración sólo suponían el cinco por ciento de nuestros ingresos", asegura el empresario, que trabajaba con compañías de la talla de "Du Pont, Thyssen o Bayer", según sostiene. "Siempre destacamos como una empresa transparente", añade.

Por otro lado, las defensas de los hermanos Víctor Manuel y José Roberto Muñiz, propietarios de Comercial Asturiana de Papelería (Igrafo), denunciaron durante la primera jornada del juicio "la vulneración de derechos fundamentales" de sus clientes ante la titular del Juzgado de lo Penal 3 de Oviedo.