Nueva tragedia en los Picos de Europa, de nuevo en el concejo Cabrales, solo cuatro días después de que falleciese en el HUCA el escalador catalán que se precipitó desde quince metros en el Urriellu hace justo una semana. Dos montañeros que se habían perdido mientras realizaban una ruta desde Arenas de Cabrales, se precipitaron desde una altura de unos cien metros en la zona de La Escampada, cerca de la localidad de Tielve. A consecuencia de la caída, falleció el gijonés Carlos Álvarez Ramos, de 56 años, y resultó herida Elda T. G., de 55, con la que estaba realizando la ruta. Los montañeros se accidentaron muy cerca del lugar en el que hace dos años falleció un pastor de Tielve, experto conocedor de la zona. Las dos víctimas de este percance son grandes aficionados a las carreras de montaña (trail running) y han competido en las filas del equipo gijonés Run04, la mujer con muy buenos tiempos en la categoría femenina.
La pareja había salido a las diez de la mañana de Arenas de Cabrales, con el objetivo de subir la canal de Somas, una ruta bastante complicada, con tramos de roca, simas y zonas de gran verticalidad, a lo que se suma la presencia de una corriente de agua. Los dos montañeros avanzaron, según indicaría más tarde la mujer, unos quince kilómetros y luego intentaron regresar a Arenas, pero no encontraban el camino de vuelta. Hacia las nueve y diez de la noche del sábado, la mujer llamó al 112 explicando que no sabían donde se encontraban. Posiblemente, en ese momento ya se había desplegado una densa niebla en la zona.
Se montó de inmediato un dispositivo de búsqueda para tratar de localizarles, en el que intervinieron el jefe de Bomberos del SEPA de la Zona Oriental, un bombero del parque de Cangas de Onís, dos miembros de la Unidad Canina de Rescate, otros dos del Grupo de Rescate, además de dos agentes de la Sección de Rescate e Intervención en Montaña (Sereim) de la Guardia Civil, con base en Cangas de Onís. Los equipos estuvieron rastreando la zona durante horas, desde la localidad de Escarandi, por la senda de Caoru, hasta Tielve y desde este último punto hasta Arenas. También recorrieron la canal de Somas, pero los montañeros no aparecían. Ya de madrugada abandonaron el rastreo, pero lo retomaron a primera hora de la mañana de ayer domingo.
Pudo incorporarse el helicóptero del Grupo de Rescate del SEPA, que sobre las diez menos diez de la mañana pudo localizar a los dos montañeros, en una canal que va a dar a Tielve. Según la impresión de los bomberos, habían sufrido una caída de unos cien metros, en una zona con una fuerte pendiente de roca. Carlos Álvarez Ramos estaba ya fallecido cuando llegó el helicóptero, mientras que Elda T. G. sufría policontusiones, aunque no revestían gravedad. No obstante, la mujer se encontraba en un estado de gran ansiedad, debido a la extrema situación que acababa de vivir.
Tras dejar junto al cadáver a tres rescatadores, los pilotos evacuaron a la mujer. Debido a la niebla que circundaba los Picos, el helicóptero solo pudo llevarla hasta Poncebos, al inicio de la Ruta del Cares. Hasta allí se desplazaron la ambulancia de Parres y el médico de Cabrales, así como la UVI-Móvil de Arriondas, que la trasladaron al Hospital parragués donde quedó ingresada.
El helicóptero volvió a La Escampada para evacuar el cadáver, que trasladó primero al refugio del Urriellu y más tarde a la collada de Pandébano, donde quedó a cargo de los guardias civiles de Montaña, actuando en calidad de Policía Judicial. El cuerpo fue posteriormente traslado al Instituto de Medicina Legal, donde se le practicará la autopsia presumiblemente hoy lunes.
Desorientados
Parece ser que la pareja se desorientó y en lugar de bajar por el canal de Somas emprendieron el descenso por la zona del Duje. Según los expertos se trata de una zona poco transitada y peligrosa donde es normal que la niebla haga acto de presencia entrada la tarde. Los dos cayeron muy cerca del lugar donde en diciembre de 2016 el pastor de 45 años de Tielve Eduardo Díaz Herrero, perfecto conocedor de la zona, falleció despeñado cuando cuidaba un rebaño de cabras.
El guía de montaña Xuacu Álvarez aseguró que con niebla "es muy fácil perderse por ese lugar". Señaló que al haber poco ganado los caminos han desaparecido. "Te metes en la canal pensando que es por donde subiste y como son todas iguales a lo mejor encuentras un cortado y te despeñas. Es una zona muy poco transitada. Hay que andar muy fino por esos terrenos", indicó.
"Es un lugar con unos acantilados tremendos. Parece fácil pero es una zona traicionera. Si te pierdes puedes llegar a caer encima de canales con cortados. Lo aconsejable, en caso de perderse, es no moverse y pedir ayuda. Cada vez hay más gente en el monte y es lógico que ocurran más accidentes. Es una desgracia que le puede pasar a cualquiera, incluso a una persona experimentada", destacó el guía de montaña Eric Pérez.
