La inquietud se apoderaba ayer de los asturianos que tienen billete para mañana en alguno de los vuelos que Ryanair oferta desde el aeropuerto de Santander. La aerolínea anunció primero la cancelación de 190 vuelos por la huelga de sus tripulantes, y después redujo la cifra a 150, pero sin aclarar los que iban a afectar a España. La legislación impide que la compañía pueda preguntar a sus trabajadores si van a secundar el paro. Así que ayer no había ningún vuelo cancelado, pero en realidad la incidencia no se sabrá hasta mañana.

Cientos de asturianos utilizan los vuelos que la compañía irlandesa de bajo coste ofrece desde el aeropuerto de Santander, y que en la actualidad cubren 14 destinos nacionales e internacionales: Tenerife Sur; Barcelona; Málaga; Valencia; Marrakech (el único directo desde el norte de España); Roma; Milán; Berlín; Bruselas; Weeze (Bélgica); Londres; Edimburgo; Budapest y Dublín.

La Dirección General de Trabajo ha citado a la empresa y a los sindicatos a una nueva mediación para hoy mismo, con el objetivo de evitar el paro en los seis países donde opera: España, Bélgica, Holanda, Portugal, Italia y Alemania.

Mientras tanto, el Ministerio de Fomento ya fijó a los servicios mínimos y obliga a Ryanair a garantizar el 59 por ciento de los servicios para cada ruta peninsular sin alternativa cuyo recorrido dure cinco o más horas, y lo mismo para las rutas internacionales. Para los trayectos inferiores a cinco horas, la tasa es del 35 por ciento de los vuelos. A las islas no puede haber cancelaciones.

La empresa que preside Michael O'Leary indicó en un comunicado que la reducción a 150 vuelos cancelados se debe a que "la gran mayoría" de sus empleados "trabajará con normalidad", sin aportar más detalles.