El Gobierno regional no ve opción de "valoración o discusión" en la propuesta del Fomento para compensar una nueva rebaja del peaje del Huerna en base a la asunción de nuevas cargas por los gobiernos de Asturias y Castilla y León. "Las comunidades no pueden permitirse una bonificación de este tipo, ni económica ni técnicamente, puesto que en la conexión a Madrid ya existe otro peaje, el de Guadarrama, y no estamos en la idea de pagar dos veces por su uso", subrayó el consejero de Infraestructuras, Fernando Lastra. Y agregó: "La privatización del Huerna hasta 2050 es consecuencia de la decisión de un gobernante: Álvarez-Cascos", señaló, "que no representaba los intereses de España imponiendo a los asturianos una carga absolutamente evitable".

Para el presidente de la Federación de Empresarios (FADE), Belarmino Feito, la propuesta abunda en el "aislamiento" en materia de infraestructuras del Noroeste. Feito definió como "una tomadura de pelo" gravar a las regiones. El Presidente Javier Fernández fue más allá en las críticas al asegurar que la ampliación del peaje del Huerna aprobada con el PP en el gobierno fue "el golpe más seco para Asturias". El jefe del Ejecutivo acusó a la presidenta del PP, Mercedes Fernández, de "vender Aucalsa y ampliar el peaje hasta 2050". La réplica no se hizo esperar: "¿A quienes haremos la transferencia del peaje del Huerna: ¿a Urkullu o a Torre?", planteó Fernández.