No todos los homenajeados en el día de ayer llevaban tricornio. Hay quienes se lo pusieron, pero hace tiempo que ya lo aparcaron tras su jubilación. Y hay quienes, sin llevarlo de forma oficial, bien podrían merecerlo.

"Es algo muy grande, no me lo esperaba", acertaba ayer a balbucear Mateo Vicente Rodríguez quien, a sus 87 años, recibió ayer el homenaje de sus compañeros a toda su trayectoria. "Estoy encantado, muy contento", aseguró Vicente, que sirvió en el instituto armado durante casi tres décadas, en destinos como Sama, Avilés o Gijón y otros menos habituales.

Vicente fue pionero al irse como voluntario a Guinea Ecuatorial, en su tiempo como colonia española. "Fuimos los primeros que nos alistamos para ir", rememora el Guardia Civil jubilado. "Cuando llegamos, aquello estaba casi sin civilizar", explica Vicente, quien recuerda que "nos pusimos al frente de todo, cuidando por el orden del lugar". Para el homenajeado, durante su trayectoria en la Benemérita "hubo momentos buenos y otros muy malos, pero sin duda mereció la pena".

En el acto de ayer también se procedió a homenajear a tres civiles. Alnair Vivanco y Sindia Riesgo, trabajadoras de la compañía aérea Iberia "demostraron su alta cualificación profesional y su compromiso cívico" el pasado 19 de febrero, cuando alertaron a la Guardia Civil de sus sospechas acerca del contenido de unas maletas que dos hombres portaban en el Aeropuerto de Asturias. Así se pudieron intervenir 25 kilos de angulas que miembros de una organización criminal de ámbito internacional intentaban exportar de forma ilegal. Esta y otras actuaciones posibilitaron finalmente la realización de la "Operación Elver" que se saldó con 10 detenidos de nacionalidades española, china y marroquí, impidiéndose el comercio ilegal de mas de 5.000 kilogramos de angulas.

El tercer civil homenajeado fue Miguel Ángel García Calderón, conductor de la empresa Alsa, que el 24 de abril, en Corvera, intervino en auxilio de un Guardia Civil que yacía inconsciente en el suelo a merced de un hombre que le había agredido brutalmente cuando el miembro de la Benemérita, en ese momento fuera de servicio, lo había reconocido como una persona en busca y captura. El conductor y otros pasajeros "pusieron de manifiesto su valor y cualidades cívicas" al intervenir, aún a riesgo de su integridad personal.

También se impuso ayer la Orden del Mérito de la Guardia Civil a Pablo Villabrille, Serván Peguero y Noel Celimendiz, miembros del GREIM, por su actuación en las labores de rescate de los cuerpos de los tres montañeros zamoranos fallecidos en la vertiente cántabra de los Picos de Europa.