No es ningún secreto que a la Reina Letizia le encanta cuidar de su alimentación y la de su familia supervisando los menús para que sean los más completos, sanos y equilibrados posible. De hecho, en la dieta de Zarzuela nunca falta la sopa de verduras. Y ayer, en Moal, la Reina hizo acopio de productos para el próximo caldo de la familia real. Bajó a la huerta.

-¿Qué te parecieron la lechuga y los calabacines?

La pregunta de doña Letizia fue recibida con asombro por el rey Felipe. Lechugas inmensas recién cogidas para la ocasión. Tomates como puños. Miel casera. Manzanas de las pomaradas locales... Toda la huerta moalesa tenía extasiada la Reina. Olía la fruta, tocaba las lechugas, preguntaba a las afanadas horticultoras cómo lograban semejante calidad... Doña Letizia revolvía en las carretillas de hortaliza como si ayer, en Moal, hubiera salido al mercado.

"Lo nuestro es lo auténtico", apuntó con orgullo Telvi Alonso, una de las integrantes de la Asociación de Mujeres de Moal que ayer agasajaron a los Reyes con jabones elaborados por ellas mismas que entregaron las más pequeñas del colectivo: Manuela Lago Martínez, Gema Lago Lago y Sara Fernández Lago.

"La Reina preguntó mucho por la verdura y se quiso llevar una lechuga", señaló Silvia Lago. Las mujeres le prepararon mucho más que eso. Rellenaron unas bolsas con lechugas, tomates, calabacín y también un cesto de manzanas. "Les encantó la muestra de las verduras y eso es lo que tenemos en Moal, lo natural", subrayó la presidenta de la asociación, Mari Carmen Álvarez.

Al rey Felipe VI le hicieron entrega de sendas botellas de sidra elaborada al modo tradicional. "Esto no sabe igual después de pasar el Negrón", advirtieron entre risas a los monarcas. "Todo natural cien por cien", insistían las mujeres de Moal que no perdieron la oportunidad de retratarse con la Reina y comentarle las bondades de los talleres que las reúnen semanalmente.

Telvi Alonso es una de las fundadoras de la asociación. Al inicio de temporada realizan una salida al monte para recoger hojas y otras materias primas que emplean luego para realizar "collages". "Cuando nos juntamos en las antiguas escuelas cada una prepara su cuadro, todo acompañado siempre de una merienda", continuó esta entusiasta vecina que ayer vivía con cierta morriña que sus tres hijas, todas fuera de Asturias, no pudieran vivir en persona el día grande de Moal. "La que está en Ibiza seguro que lo está siguiendo con mucha intensidad", aseveró para volver a explicar algunas de sus actividades. "Nosotras mismas adecentamos el local social donde nos juntamos las mujeres de aquí para disfrutar de nuestro tiempo libre", detalló.

Junto a la hortaliza y la sidra hubo más detalles gastronómicos para los Reyes. También tuvieron la oportunidad de ver pan recién hecho en un antiguo horno de leña perteneciente a una casa con más de 300 años de historia. De nuevo, doña Letizia no dudó en participar y ayudó a los panaderos a sacar del horno unas empanadas y alguna hogaza. Se interesaron por saber de qué eran las empanadas y al oír de bonito la Reina dijo: "La de bonito, para mí". Finalmente, salieron de la antigua cocina con unas hogazas y dos empanadas."Dijeron que las llevaban para sus hijas", apuntó Ana Gromaz. Pero fue "lo de la huerta", como se encargó de remarcar Telvi Alonso, "lo que más le llamó la atención", a la reina y madre en Zarzuela, Letizia Ortiz.

El detalle institucional del Ayuntamiento para los Reyes también pasa por la mesa. Los monarcas se llevaron un "cachu", recipiente de madera en el que siempre se ha bebido el vino de Cangas.

En el stand de la Asociación de Mujeres también les esperaba Sandra García Gomaz, discapacitada física, quien quiso explicar todos los detalles de la exposición de trabajos artesanos realizados por la féminas de la localidad en diferentes talleres. "Ahora, que se sepa, somos nosotras las que mandamos en Moal", proclamó al término de la jornada una de las fundadoras del colectivo, Telvi Alonso.