Los sindicatos consideran que el salario social y las ayudas al alquiler fueron las dos grandes bazas que ayudaron a mermar en Asturias los efectos de la crisis.

La semana pasada se daban a conocer los datos del informe "Pobreza infantil en Asturias" que desvelaron que Asturias es la tercera comunidad autónoma con la tasa más baja de pobreza y exclusión social en la infancia, con el 18,4 por ciento de población de menos de 18 años.

Esta mañana se celebró en la Junta General del Principado una comisión especial de estudio sobre la situación de pobreza en Asturias y en la que participaron Comisiones Obreras, UGT y el Colegio Oficial de Trabajadores Sociales. Gilberto Garcia, de Comisiones Obreras, explicó que la "desigualdad es la causa de la pobreza" y la representante de UGT, Enma Fernández, añadió que, aunque la tasa asturiana de pobreza nos sitúe como los quintos del país, no es motivo para alegrarse pero sí que señaló que tanto "el salario social como las ayudas al alquiler" ayudaron a paliar los efectos de la crisis en el Principado. Sin embargo, hoy en Asturias "la mitad de los desempleados no cobran ningún tipo de subsidio", concretó Fernández.

El estudio de "Pobreza Infantil en Asturias" destaca que casi la mitad (el 48%) de los hogares monoparentales está en riesgo de exclusión social. En casi la totalidad de los casos la cabeza de familia es la madre y su situación laboral es de precariedad.

La nómina del salario social del pasado mes de septiembre ascendió a algo más de 93,7 millones de euros, que se repartieron entre 22.585 hogares, lo que significa que atendió las necesidades de más de 40.000 asturianos, muchos de ellos niños. Son las cifras más elevadas desde que la renta básica se empezó a aplicar en 2006, pero además, supone un abono mensual de 10.426.660 euros.