La avería de una unidad de tren en Laviana provocó ayer la cancelación de unos 40 servicios de cercanías de Renfe Ancho Métrico (RAM, antigua Feve). Fuentes de la compañía explicaron que, aunque la unidad averiada no entorpeció la circulación, pues quedó detenida en la estación de Laviana, el plan del día quedó "desbaratado", porque no había material de repuesto disponible en ese momento. El comité de empresa denunció la "precariedad" del servicio: "No hay material fiable", "ni suficientes unidades de reserva". Y" lo ocurrido hoy es lo de todos los días"

La avería de la unidad, que realizaba el primer servicio de la mañana, obligó a suspender los servicios entre Gijón y Oviedo, donde opera también Renfe Cercanías y la incidencia sobre los viajeros es "mucho menor", para destinar las unidades disponibles a la línea Gijón-Laviana, donde no hay alternativas a Feve. Además, la operadora fletó autobuses para llevar por carretera a aquellos pasajeros que lo demandaron desde Gijón a El Berrón, donde ya pudieron tomar trenes.

El presidente del comité de empresa de Feve, Luis Blanco, de UGT, indicó que el principal "problema" es que parte de las 25 unidades que Feve tiene en Asturias están en la actualidad en reparación, con lo que el material disponible está "muy ajustado". Esto implica que la avería de cualquier unidad obliga a cancelar servicios. Resaltó que las cancelaciones se producen "casi a diario". El sindicalista reclamó la compra de nuevas unidades y subrayó que el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, ha prometido recientemente que su departamento adquirirá 18 trenes para Cantabria, como había asegurado su antecesor en el cargo, Íñigo de la Serna. El ugetista demandó para Asturias el mismo trato que para Cantabria y lamentó que el plan de cercanías para el Principado recogiera la adquisición de "solo" cuatro unidades. Blanco aventuró que los trenes que queden en desuso en Cantabria con la llegada de las nuevas "acabarán en Asturias".