El consejero de Empleo, Industria y Turismo, Isaac Pola, no descarta convocar un nuevo contrato de conectividad aérea internacional, modificando alguno de los parámetros (frecuencias semanales, número de asientos...) que en su opinión han provocado que ninguna compañía presentara en el anterior ofertas para volar a Londres, París y Fráncfort.

Pola reveló que mantiene una ronda de contactos con diferentes aerolíneas para ver su disposición a operar al extranjero desde Asturias sin incentivos públicos, y, si eso no fuera posible, modificar las bases del contrato de conectividad aérea para hacer la oferta más atractiva y conseguir que alguna compañía presente ofertas. Insistió en que la posibilidad de que una aerolínea opere desde un aeropuerto no se centra en "factores estructurales, disponibilidad de aviones, costes operativos de los aeropuertos, programaciones o expectativas de rentabilidad".

Destacó que la compañía Air Europa ha decidido operar la ruta Asturias-Madrid a partir de marzo sin incentivos públicos. Y que esta decisión mejorará la conexión con la capital y conectará a los asturianos con cuarenta destinos internacionales. "Es un ejemplo ilustrativo", resaltó Pola.

El Consejero fía el futuro de las conexiones al extranjero a la reunión, el lunes, del Comité de Coordinación Aeroportuario, que reunirá a representantes del Estado, el Principado y AENA. Las declaraciones del Consejero coincidieron en el tiempo con las realizadas por el director general de EasyJet y presidente de la patronal española de aerolíneas, Javier Gándara, quien reveló que la compañía canceló los vuelos de Asturias a Londres, pese a que "iban llenos" y había "un rendimiento razonable", porque otras rutas ofrecían "un rendimiento mejor", señaló.

Un mercadeo

Gándara replicó al presidente de la patronal de las agencias de viaje, Íñigo Fernández, quien denunció en declaraciones a LA NUEVA ESPAÑA el "mercadeo de subvenciones" creado por aerolíneas que buscan ayudas públicas para "garantizar resultados económicos sin poner un avión en el aire". Gándara negó esas acusaciones; destacó que los usuarios pagan a veces más por el taxi que va al aeropuerto que por el billete de avión, y subrayó que la "inmensa mayoría" de las rutas que operan en España carecen de ayudas públicas.

El director general de EasyJet explicó que las compañías deciden sus rutas con "serenidad, análisis y ciencia", por factores como la demanda o el atractivo del destino; pero "a veces" la cuestión es "el coste de oportunidad", porque "no es que no sea rentable volar a este sitio, sino que es más rentable volar a otro", añadió.