La exconcejala de servicios sociales de Llanes, Silvia Ruenes, ha indicado en el juicio por prevaricación contra ella y una trabajadora social por dar una ayuda para evitar que un maltratador entrase en prisión que ella "no leía todos los informes" y que se fiaba de las funcionarias. La ex edil ha indicado que el maltratador, que debía pagar una multa de 1.500 euros por un caso de violencia doméstica, le había dicho que la ayuda era para pagar una multa de tráfico.

Ruenes ha dicho que no tiene idea de derecho. "Es cierto, tenía que haber leído todos los informes, es un error, yo solo ponía el conforme, me fiaba de las trabajadoras sociales", ha señalado.

La fiscal le ha preguntado si no conocía el caso del solicitante por su pertenencia a la comisión de violencia de género, y ella ha dicho que en las reuniones a las que acudió nunca salió a relucir su nombre. El hombre habia acudido al ayuntamiento a pedir trabajo, porque necesitaba el dinero. No le dieron trabajo, pero si una ayuda para pagar la multa por un delito de maltrato.