Un interno del Centro Penitenciario de Asturias salvó ayer su vida gracias a la Guardia Civil. El hombre, cuya identidad no ha trascendido, tenía que ser trasladado al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) para asistir a una consulta médica.

Cuando los agentes entraron en la celda le encontraron tirado en el suelo. Rápidamente lo sacaron al pasillo y le realizaron las maniobras de reanimación cardiopulmonar.

Mientras uno de los agentes se encargaba de mantener la posición frente-mentón al interno para facilitar la entrada de aire al organismo, otro le realizaba la ventilación artificial y compresiones torácicas hasta que recuperó la respiración. Un tercer guardia civil dio aviso al servicio de Urgencias del HUCA.

Una vez estabilizado, el interno fue trasladado por el equipo médico a la UCI del Hospital. A las 15.30 horas recibió el alta médica y retornó al centro penitenciario.