Están cargados de ideas, de buenas ideas y piden que se tengan en cuentan. Sus preocupaciones desde sus 14 años son por este orden: "La desigualdad, la violencia de género y el medio ambiente". Lo explican Ana Valeria Ramos Sosa y Nerea Pérez Márquez, alumnas del Instituto de Educación Secundaria de La Corredoria y que ayer tomaron la palabra durante el acto de Unicef. "Nos da mucha alegría que Oviedo celebre este acto. La participación tiene que ser colectiva y vosotros nos estáis acompañando en este proceso", explicó Ana Valeria Ramos, en referencia a la sensación que tienen de estar creciendo y desarrollándose arropados por las entidades locales, que se han dado cuenta de que su implicación es fundamental para el desarrollo feliz e integrador de sus menores. "Aquí está la magia de la participación", remató su compañera de instituto. Y todos aplaudieron a las adolescentes por su acertado discurso.

Pilar Varela, consejera de Servicios y Derechos Sociales del Principado de Asturias, también tomó la palabra en el acto de ayer y resaltó que "encontrarse con el cartel que indica que estamos en una Ciudad Amiga de la Infancia es garantía de que se está trabajando para desarrollar todos los derechos de los menores". Varela hizo hincapié en la cifra positiva de que en Asturias la mayoría de los niños, niñas y adolescentes viven y se desarrollan en localidades que cuentan con este reconocimiento. María de los Ángeles Espinosa, directora del IUNDIA (Instituto Universitario de Necesidades y Derechos de la Infancia y la Adolescencia) reclamó a los asistentes una mayor implicación con los jóvenes. "Es necesario impulsar las alianzas a nivel municipal para impulsar así el desarrollo infantil, es fundamental el esfuerzo de las Ciudades Amigas de la Infancia en todas las fases del desarrollo de los niños para garantizar las mejoras en su futuro, pero sobre todo en su presente", concluyó.

Derechos para todos

Una Ciudad Amiga de la Infancia es aquella que se compromete con el cumplimiento de los derechos de los niños y los adolescentes, tal como se establece en la Convención sobre los Derechos del Niño. Además, este reconocimiento implica un compromiso político en el que se establecen metas que mejoran el bienestar de la infancia, a medio y a largo plazo, y donde también se trabaja para que los derechos de los más pequeños se hagan patentes y verdaderos. Y parece que todas las localidades que cuentan con este reconocimiento han sido capaces de dar el apoyo a sus jóvenes, todo el que necesitan. "Los niños son la máxima prioridad de los gobiernos locales, es la forma de construir el presente mirando al futuro", concretó el alcalde de Navia y presidente de la Federación Asturiana de Concejos (FACC), Ignacio García Palacios. Y debe ser verdad, vista la ilusión con la ayer todos los asistentes al acto recibieron su reconocimiento. Un aval de que su apuesta de futuro son los jóvenes.