Podemos ha dado su visto bueno al primer pacto presupuestario entre los tres partidos de la izquierda asturiana pero ha insistido en las dos comparencias que abrieron ayer el fuego del debate político en la Junta que no se trata de un cheque en blanco. "Estaremos vigilantes", advirtió Paula Valero al consejero de Presidencia mientras que Lorena Gil denunció "opacidad" en algunas de las explicaciones de los responsables de Industria. "He visto dudas y pegas", reprochó Gloria García, diputada del PP, quien calificó de "lastre para esta comunidad" unas cuentas que el forista Pedro Leal tildó de "malas por mucho autobombo que la izquierda le quiera dar" . "Son unos presupuestos de un inmovilismo suicida", concluyó el diputado de Ciudadanos, Armando Fernández Bartolomé.