La decisión de IU de "plantar" a la Federación Asturiana de Empresarios (FADE) por haber aceptado una reunión con la formación ultraderechista Vox alarga la pugna política entre la patronal y la coalición de izquierda. A la reacción de Belarmino Feito, que ayer cargaba contra IU anunciando su intención de descartar "presiones" y "chantajes" a su organización, ha respondido hoy el portavoz de IU en la Junta, Gaspar Llamazares, dando por perdida la "neutralidad política" de la patronal. El diputado lamentó la "desabrida" respuesta de FADE a su decisión de no acudir al encuentro después de su “cálida recepción a la extrema derecha” y retiró a la organización empresarial también su papel de interlocutor social independiente, situándose, claramente al decir de Llamazares, "en el bloque de reconstrucción de la derecha entorno a postulados ultraconservadores".

Cuando FADE pretende ser un interlocutor social independiente, persevera Llamazares, "nos falta al respeto a las fuerzas políticas en general y a ésta en particular. No hay tal independencia, sino que la patronal se ha situado como un interlocutor político más de la derecha" con sus "postulados ultraconservadores con respecto, por ejemplo, al ultraliberalismo, o a una concepción tradicionalista de la cultura y de la política, y lo trataremos como tal”, promete el portavoz de IU. A Llamazares le resulta "curioso" que "la patronal sea la única entidad empresarial que prefiere una prórroga a un presupuesto" en una posición que, a su juicio, equivale a un "cuanto peor, mejor". “Lo que no podemos aceptarle", remata en respuesta a las alusiones de Feito a los vínculos de IU con Podemos y las fuerzas independentistas catalanas, "es que nos sitúe fuera de la Constitución y fuera de la democracia: nosotros no hemos preguntando dónde estaban cada uno de los dirigentes de la FADE en ese momento. Sabemos dónde estábamos nosotros, tenemos muy clara nuestra apuesta por la Constitución y la democracia y no permitiremos a ninguna organización que, al socaire de su pretendida independencia, caracterice a la política asturiana o a las fuerzas políticas asturianas de constitucionalistas o inconstitucionalistas”.

Es la siguiente batalla de una pugna que nació de la negativa de IU a participar en la ronda de contactos que FADE pretende mantener con las fuerzas políticas asturianas para exponerles las conclusiones del diagnóstico que ha efectuado sobre el futuro de la región y que está contenido en su documento "22 acciones ineludibles para el progreso de Asturias". Hasta ahora, la patronal, que ha sido muy crítica con el pacto presupuestario recién alcanzado entre las fuerzas de la izquierda asturiana, se ha reunido con PP y Ciudadanos y aceptó, a iniciativa de Vox, un encuentro también con la formación de ultraderecha. A raíz de ese contacto, IU rehusó participar en los contactos afeando a Feito que no rechazar la invitación para "aislar" a un partido "que se aleja tanto de la convivencia democrática".