El secretario general del PP, Luis Venta, arremetió esta mañana contra la pretensión del Principado de subir el impuesto sobre las afecciones ambientales del agua, el antiguo canon de saneamiento, e introdujo en su planteamiento contrario algunas sospechas por los contratos que el Consorcio de Aguas de Asturias (Cadasa) suscribió con Valoriza, "empresa investigada en el 'caso Enredadera'" de supuesto amaño de contratos públicos en toda España. Venta anota en la relación entre ambas entidades "contratos menores e importantes subrogaciones por valor de casi seis millones de euros", de sobra para que en la comisión de investigación que abordará el asunto en la Junta el PP vaya a pedir "la comparecencia de los responsables de Cadasa para que expliquen qué pasa". El diputado concretó la acusación con referencia a las subrogaciones a Valoriza de un compromiso por valor de 5,9 millones para la conservación del canal del Narcea en Ablaneda y de otras para la explotación y conservación de la red del Alto Nalon, de la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de Sobrescobio, o de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de La Franca (Ribadedeva), así como cinco contratos menores suscritos entre 2017 y 2018 por valora de casi 251.000 euros.

Venta introdujo la denuncia dentro de otra sobre "la asfixia fiscal" a la que el Gobierno del Principado quiere "esquilmar el bolsillo de los asturianos" mediante la subida de tarifas del impuesto sobre las afecciones medioambientales del agua. Cuando el consejero de Infraestructuras, Fernando Lastra, "dice que algo va mal", como hizo el lunes en una jornada técnica de Cadasa con alcaldes y concejales, "no se refiere al saneamiento, que va mal", interpreta Venta, "sino a lo que se recauda". El diputado popular afea al Gobierno que en 2017 haya habido un remanente de 13,5 millones de euros en la Junta de Saneamiento y pese a tener "los cajones llenos" "quiera llenarlos más para no utilizarlos". "Es una obsesión", concluye el número dos de los populares asturianos, que relaciona esta pretensión de subida fiscal con la "humillación" a la que a su juicio Madrid somete a Asturias por bajar peajes de autopistas y subir el del Huerna "con el silencio cómplice de la Federación Socialista Asturiana". Volviendo al agua, censura "la obsesión del Principado por los macroconsorcios" como Cadasa, "por crear gobiernos paralelos", y se pregunta "por qué las redes de Cadasa están abandonadas mientras se deja el dinero en un cajón y hay pérdidas de más del 25 por ciento del consumo. Son unos inútiles en la gestión", concluye.