Un dispositivo de bolsillo, similar a un medidor del azúcar en la sangre, pero destinado a indicar los niveles de creatinina. Ésta es la gran apuesta de la empresa asturiana de investigaciónn biomédica Healthsens, que en los próximos meses comenzará a comercializar estos aparatos. Esta nueva tecnología permite realizar un seguimiento continuo de la enfermedad renal crónica. La citada compañía acaba de reforzar su consejo científico asesor, con la incorporación de cinco expertos internacionales en el campo de la nefrología, entre ellos el italiano Carmine Zoccali, el rumano Covic Adrian Constantin, y el estadounidense Luis Augusto Juncos.
"Nuestro objetivo es que este nuevo procedimiento aumente la tasa de detección precoz de la enfermedad renal y facilite el seguimiento de los niveles de creatinina en los pacientes diagnosticados", explicó a este periódico Iván Merás, accionista de referencia de Healthsens. La detección temprana y un control más estrecho de la nefropatía debe redundar "en un mejor control de la enfermedad y de los costes asociados", añadió Merás. Precisamente uno de los puntos fuertes de este dispositivo radica, según sus impulsores, en que su uso acarrea a la larga un ahorro para los sistemas sanitarios, por cuento restringirá el volumen de muestras analizadas en los laboratorios clínicos y las derivaciones a consultas de especialistas.
Healthsens es una empresa creada en 2009 como spin-off por científicos de la Universidad de Oviedo y del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Se dedicada al desarrollo y fabricación de dispositivos médicos para el diagnóstico "in vitro". De aquellos inicios continúan en el consejo asesor, como miembros natos y socios de la compañía, Agustín Costa, catedrático de Química Analítica, y Carlos López Larrea, jefe del servicio de Inmunología del HUCA y catedrático de Inmunología; además de Gabriel Álvarez Menéndez, director de I+D de Healthsens. A ellos se les han añadido cinco miembros electos: los tres ya citados al inicio de estas líneas y, además, Jorge Cannata Andía, catedrático de Medicina de la Universidad de Oviedo y Director de la Unidad de Gestión Clínica de Metabolismo Óseo del HUCA, y Juan Florencio Macías Núñez, profesor de Nefrología y Geriatría y director del Centro de Investigación Biomédica de la Facultad de Medicina de Salamanca.
El nuevo comité colaborará con Healthsens ofreciendo asesoramiento relacionado con el producto sanitario "Creatsens", que es el nombre de mercado del dispositivo médico para el diagnóstico y seguimiento de la enfermedad renal. La intención de Merás es que el aparato tenga una expansión mundial. "Con un 10 por ciento de la población mundial afectada por enfermedades renales, se convertirá en una herramienta eficaz a nivel global de prevención y monitorización, que derivará en una mejoría en la calidad de vida del paciente renal y una notable reducción de los costes sanitarios", enfatizó Iván Merás. "La facilidad de uso y el grado de miniaturización del dispositivo" permitirá, según Merás, usarlo en centros de atención primaria, en farmacias o a "nivel usuario", facilitando el autocribado por parte del propio paciente.
