Dirigentes vecinales de la zona oeste de Gijón -una de las más castigadas por la polución- y de la Plataforma Contra la Contaminación de Gijón señalaron ayer que "la falta de lluvia no tiene la culpa de la contaminación en la zona oeste de la ciudad", sino ciertas empresas "descontroladas" por el Ayuntamiento de Gijón y el Gobierno del Principado de Asturias. El responsable de medio ambiente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de la zona rural de Gijón "Les Caseríes" e integrante de la Plataforma, José Luis Fernández Bernardo, lamenta que la consejería de Medio Ambiente "culpe de todo a los coches". Desde estos colectivos se apuntó que ante la contaminación emitida, la diferencia causada por la climatología es que si llueve esa polución del aire acaba trasladándose a la tierra o al agua y si no llueve, elevando los niveles de polución atmosférica.

"Si llueve, lo que ocurre, es que esa polución se disuelve y cae a la tierra, a los campos, huertas o frutales, además de a fuentes y manantiales, a los ríos o al mar; y también sobre los seres humanos, la fauna o la flora", agrega el representante, que vincula los altos niveles de contaminación con riesgos para la salud como tumores, trastornos intestinales o molestias en la piel. Por su parte, la Coordinadora Ecologista denunció ayer la existencia de "nubes amarillas con óxidos de hierro", procedentes de la acería de ArcelorMittal en Carreño.