Los bandos toman posiciones en la aproximación a un fin de semana clave en el conflicto que amenaza a IU de Asturias. Los detractores de la confluencia de la coalición con Podemos, entre los que se cuenta Gaspar Llamazares, han convocado un encuentro esta tarde en Gijón para "clarificar" en asamblea "la posición de todos" y "lanzar el trabajo hacia las elecciones". Es un contraataque, un rearme y una tentativa de exhibición de fuerza frente a la dirección federal y sobre todo ante los movimientos que anticipa el "informe sobre los incumplimientos estatutarios" de Llamazares y sus compañeros de Actúa que la cúpula federal ya tiene redactado y que llevará el domingo al debate en una reunión de la coordinadora en cuyo orden del día figura la decisión sobre la apertura de expedientes disciplinarios.
El texto no propone expresamente sancionar al portavoz en la Junta -dice que el órgano de dirección "deberá abordar el debate y valorar las actuaciones a llevar a cabo"-, pero sí constata su incumplimiento de los estatutos de la coalición con "faltas graves o muy graves" sustanciadas en "el impulso de una opción electoral y la promoción de otro partido -Actúa- que ha declarado su voluntad de competir con IU en las elecciones europeas" y en otros niveles de la próxima convocatoria electoral: mencionan León y hablan de Ávila, Baleares o algún municipio madrileño.
La grieta que abrió la declarada vocación de concurrencia electoral de Actúa, el partido que apadrinan entre otros Llamazares y el exjuez Baltasar Garzón, se aproxima así al momento en que se decidirá el futuro inmediato. El documento de la coordinadora relata hechos y expone argumentos para probar la vocación de Actúa de competir con IU en diferentes escenas electorales. Se remite a las declaraciones públicas de Llamazares y de los otros promotores del partido, transcribe los audios filtrados de una reunión de Actúa en la que éste se planteaba en mayo "desvestir un santo para vestir otro" y concluye dando por sentado que se han promovido candidaturas alternativas a la de IU "al margen de sus órganos y su militancia". Faltas "graves o muy graves".
El eje es la acusación de incumplimiento "muy grave", una de las vías que según los estatutos federales podrían abrir la puerta a la suspensión cautelar de los derechos como militante de Llamazares. Dirigentes asturianos afines a las posiciones del coordinador general, Alberto Garzón, se ponen en este escenario hipotético en el que el diputado asturiano podría quedar supuestamente inhabilitado desde Madrid para concurrir a las primarias de Asturias. El problema es que él ya ha anunciado su resistencia desde una posición que atribuye en exclusiva a la federación asturiana la legitimidad para instruir cualquier procedimiento sancionador. La réplica de sus críticos, cuestionada desde el sector próximo a Llamazares, deja el conflicto formulado cuando sostiene que no reconocer la sanción de la federal equivaldría a "dejar de ser IU".
En el otro lado, la versión alternativa sostiene que la instrucción de cualquier procedimiento disciplinario compete a la federación asturiana, con su identidad y sus estatutos diferenciados de la matriz federal, pero eso nada de eso está escrito y todo será jurídicamente interpretable a partir del lunes. El caso es que ayer Llamazares reaccionó ya con dureza contra el contenido de "un expediente inconsistente lleno de juicios de intenciones" del que lamenta que esté terminado antes de la conclusión, ayer, del periodo de alegaciones, o que no se hayan valorado las suyas, asegurando que la integración de Actúa en la plataforma europea que lidera el exministro griego Yannis Varoufakis carece de "listas transnacionales" y "es sólo la defensa simbólica de una opción". Se pregunta el diputado "cuál es el problema de participar como partido en una opción europea", o si "sabemos cuál es la opción de IU. ¿Dónde se ha decidido?"
La versión de IU que defiende Llamazares recibirá aliento esta tarde en Gijón, en un acto al que están convocados teóricamente los partidarios de una IU independiente de Podemos. No es, según sus promotores, un acto de apoyo a Llamazares, pero allí se defenderá, según fuentes próximas la facción llamazarista, una federación sin injerencias externas en la confección de las candidaturas y un documento que despeja dudas sobre la lealtad del portavoz a la organización en Asturias, la convicción de que no apoyará opciones que compitan contra ella y su plena habilitación para competir en las primarias.
